Museo de las aves: conocer para valorar y conservar

Usted está aquí

Museo de las aves: conocer para valorar y conservar

Moderno. Con vitrinas más grandes y pantallas táctiles el Musave ofrece al visitante un panorama más amplio del mundo de las aves.
Totalmente renovado reabre sus puertas el Musave, lugar donde ‘anidan’ más de 3 mil plumíferos

Después de casi tres años en que se mantuvo cerrado al público, por fin se puede visitar nuevamente el Museo de las Aves en Saltillo, aunque aquel espacio oscuro y de paredes negras que albergaba a más de 3 mil aves que habitan el país, hoy ya no existe. 

En la actualidad, quien ingrese al recinto se encontrará con un museo completamente diferente, aunque aloje al mismo número de especies de pájaros que ya se encontraban antes en las cinco salas.

La fachada del edificio sigue muy parecida a como se encontraba anteriormente, con las paredes de ladrillo. Las diferencias comienzan al ingresar a la primera sala, donde desde el momento en que las puertas de madera se abren, puede observarse que está mucho más iluminado que antes y en la pared el mensaje “conocer para valorar y conservar”, que es el objetivo del museo, según su fundador don Aldegundo Garza de León.

En el mismo pasillo se encuentra la historia del museo, que los niños desde siete años que ya son guías, explican detalladamente.

Luego de la descripción del museo que abrió sus puertas al público un 15 de noviembre de 1993, se aprecia el primer detalle moderno en tecnología: una pantalla curva gigante en la que se proyectan algunos videos.

Después se ubica la primera sala, donde se explica la evolución, clasificación y tipos de vuelo de las aves. Ahí las vitrinas son mucho más amplias de lo que estaban en la exhibición anterior del museo. Todas las paredes son blancas y los cristales de las vitrinas van desde el suelo hasta el techo, que también está mucho más alto que antes. 

Hay también nuevos ejemplares ubicados en el centro de la sala: tres aves de tamaño real hechas de un material que parece plástico y que existieron hace 5 millones de años, 2 veces más altas que un humano, robustas y 2 de ellas casi sin cola, la tercera es un avestruz.

Viene después la segunda sala, que muestra los ecosistemas donde habitan las aves. Entrar a esta sala es trasladarse a la selva, los bosques o el desierto, ya que en el museo hay una pequeña representación de cada uno de los hábitats de las aves.

Aves de todos colores y tamaños se pueden apreciar en esta sala, donde cada vitrina tiene una pantalla táctil que informa sobre los tipos de aves, sus características físicas y el lugar en que viven. 

Te puede interesar

La tercera sala también tiene pantallas táctiles, donde se puede elegir el ave que se desee y escuchar el canto del ave seleccionada. Además se puede observar la imagen de la misma y sus características. 

En la cuarta sala se pueden apreciar aves endémicas y cuáles son las aves que llegan de acuerdo con las estaciones del año.

Finalmente, en la quinta sala se encuentran las especias de aves que se encuentran en peligro de extinción y explica las características del águila real. 

El recorrido termina en el jardín del edificio, donde al centro se encuentran tres pavorreales machos de diferentes colores.