MEMORIAL COVID | Eleazar José Álvarez Torres: Un hombre directo y de gran corazón

Tenías diabetes e hipertensión, pero te cuidabas mucho; y aunque tenías miedo, conservabas la esperanza de superar esta enfermedad
Ilustración: Federico Jordán

Papá, no eras tan cariñoso conmigo, pero siempre supe lo mucho que me amabas.

Eleazar José Álvarez Torres, aunque la forma de educar a tus tres hijos era chapada a la antigua, hoy entiendo y agradezco que me hayas criado así. Tu forma de externar el amor era con acciones contundentes, dándoles la mano a tus seres queridos.

Una de esas ocasiones fue durante mi enfermedad, estuviste ahí en todo momento. Tal como lo hiciste cuando falleció mamá, la acompañaste hasta el último suspiro.

Nunca imaginé que este año me tocaría despedirme de ti. Bueno, lo de despedirte es solo un decir, en medio de una pandemia ha sido bastante difícil.

En el duelo me consuela apreciar el legado que me dejaste. Desde niños nos enseñaste a valorar las cosas por medio del trabajo; íbamos al rancho a podar, fumigar o cosechar.

De grande seguí tus pasos, estudiar una ingeniería y luego ser docente. Tus amigos y compañeros jubilados también te recuerdan con cariño.

Vivimos juntos un tiempo, luego de que ambos atravesamos momentos difíciles y nos quedamos solos. Tu compañía fue muy reconfortante. Gracias por ser mi fortaleza en la adversidad.

Con 71 años eras muy fuerte y hasta te veías joven.

Tenías diabetes e hipertensión, pero te cuidabas mucho. Sé que aunque tenías miedo, también conservabas la esperanza de superar esta enfermedad desconocida a la que quizá subestimamos: el COVID-19.

Los primeros síntomas llegaron el viernes 7 de agosto, parecía una simple gripe, pero llegó el lunes y comenzamos a preocuparnos luego de que pasaste todo un día acostado. Días después te hicieron la prueba, salió positiva.

A pesar de tu estado de salud, todavía te preocupaste por algunas cosas sin relevancia, como que el carpintero hiciera el clóset en la casa.

Cada vez requerías más del tanque de oxígeno y llamamos a la Cruz Roja para tu traslado al ISSSTE. Tu condición empeoró, fue inevitable tener que entubarte.

Te fuiste el martes 18 de agosto. Ya no pude verte más. Tal vez la gente no le da la importancia que se debe, pero esta enfermedad es real y es muy fuerte pasar por esto.

Papá, me haces mucha falta. Como quisiera que esto fuera un mal sueño.

Se despide de ti: Édgar Eleazar Álvarez Muza, tu hijo.