Un matrimonio feliz se logra poniendo "a tu esposo por delante", asegura el movimiento #TradWives

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Un matrimonio feliz se logra poniendo "a tu esposo por delante", asegura el movimiento #TradWives

Alena cree que una ama de casa debe estar "feliz de someterse a su esposo". Foto: Especial
#TradWives promueve papeles ultratradicionales en el matrimonio. Alena Kate Pettit es una de las mujeres que defiende esta idea. Además, indica que su papel es “estar en casa” y “hacer las tareas del hogar”

Un nuevo movimiento femenino presente en las redes sociales gana cada vez más adeptas. Sin embargo, sus pensamientos son extremadamente polémicos, ya que considera que las mujeres deben estar sometidas al esposo.

Se trata del #TradWives, que promueve papeles ultratradicionales en el matrimonio. Alena Kate Pettit es una de las mujeres que defiende esta idea y hasta ha creado un blog llamado The Darling Academy.

Consultada por la BBC, Alena asegura que se trata de un “estilo de vida femenino” que incluye “tareas de hogar”, “someterte a tu esposo y consentirlo como si fuera 1959”.

Tiene un blog donde ‘enseña’ estas prácticas, lo cual ha generado críticas por parte de feministas. Foto: Especial

En su blog, Alena afirma que un matrimonio feliz se logra poniendo “a tu esposo por delante”. Además, indica que su papel es “estar en casa” y “hacer las tareas del hogar”.

“No quiero que mi esposo llegue a casa, después de un largo día de trabajo y tenga que cocinar para mí, porque mi papel es estar en casa”, señala.

Evidentemente, su postura ha recibido muchas críticas de parte de algunas feministas que aseguran que mujeres como Alena rechazan todo lo que ellas han logrado luchando por la igualdad.

Sin embargo, Pettitt no cree que esto sea así y defiende su idea. Para ella, su modo de vida es una opción voluntaria.

“Si dices que puedes ir al mundo laboral y competir con los hombres, pero no puedes quedarte en tu hogar, con eso me estás quitando una opción que elegir", explica.

Alena creció sin padre y cuenta que su mamá debía salir todos los días a trabajar, lo que ella califica como “una carga enorme”. Fue entonces que se dio cuenta de que “no quería esa misma vida”

En 1990, cuando era estudiante, tampoco se sentía cómoda con la cultura de la época. En aquel entonces se difundía mucho la idea de “pelear con los hombres” y ser “independientes”, afirma. Sin embargo, ella estaba convencida de que “había nacido para ser esposa y madre”.

Más tarde, conoció a su marido y supo que era el ‘indicado’ luego de que le propusiera cuidarla y hacerla “sentir segura”.

"Fue como si el cuento de hadas se hiciera realidad", confiesa.

Pese a las críticas, Alena mantiene firme su postura e incluso dice que su actitud es altruista.

“Pienso que ser una esposa tradicional es invertir en tu esposo, en tu familia e inspirarlos para ser las mejores personas posibles. Es algo totalmente altruista", señala.