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Sufren acoso sexual 75% de las usuarias del transporte público en Saltillo
En Saltillo , 75 por ciento de las usuarias del transporte público sufren acoso sexual, según datos del INEGI. Un total de 40 por ciento de las mujeres cambiaron su vestimenta para evitar problemas, mientras que 25 por ciento de las mujeres fueron fotografiadas o filmadas sin su permiso.
El acoso sexual no distingue y aunque la mayoría de las víctimas son las mujeres, existe acoso de mujeres a hombres. También de mujeres a mujeres y de hombres a hombres.
“Cada que escucho su voz me estremezco, entro en pánico y solamente espero que pase pronto... Percibo sus pasos y entonces ocurre, pasa su mano por mi espalda y siento un deseo de voltearme y darle un puñetazo que le rompa toda su cara”, así platica “Juan” su desventura de ser acosado por un compañero de oficina. “Juan” es divorciado, heterosexual y quien lo acosa aparenta ser heterosexual, es casado.
Mario Alberto José de los Santos, director del Centro Estatal de Salud Mental, advirtió que el acoso es un trastorno mental de difícil tratamiento pues generalmente el acosador no quiere solucionar su problema.
“En México vivimos en la cultura sexualizada, todo lo vemos con tintes sexuales y si a esto sumamos el machismo, entonces estamos en que el mexicano tiene tendencia al acoso sexual. Así es que un acosador siente que su masculinidad está intacta cuando una de sus víctimas le hace caso y cada vez es más persistente, más intenso y más descarado”, dijo.
“Una tarde confirmé que todo lo que ella hacía era acosarme: acepté, como algo inevitable, salir a tomar un café con ella y cuando estábamos en su coche de pronto empezó a tocarme de una manera que ningún hombre me había tocado, me sentí incómoda pues no supe cómo reaccionar ya que ella era mi jefa y me había ayudado tanto después de mi divorcio, gracias a ella tenía un buen puesto y un sueldo que nunca había soñado. Cuando regresamos a la oficina presenté mi renuncia, no quise ser víctima de acoso sexual laboral por una mujer”, “Paulina”, ahora es recepcionista en un edificio y aunque sigue sufriendo acoso, principalmente de hombres, sabe poner distancia y autoprotegerse.
VERGÜENZA
El delito de acoso sexual puede considerarse como uno de realización oculta y generalmente no hay evidencia, no deja pruebas; exponerlo genera un sentimiento profundo de vergüenza en las víctimas, pues las dudas de si ellos o ellas provocaron que “eso” ocurriera, los obligan a callar.
En el Centro Estatal de Salud Mental cuentan con expedientes de reportes en contra de varios empleados, muchos con cargos importantes dentro de la empresa, pero solamente reportes, sin denuncia formal, por lo que no se puede proceder.
“Tenemos casos en los que la rotación de personal femenino es tan constante que no deja de preocuparnos, la mayoría se ha ido porque no soportan el constante acoso; pero algunas que han accedido, aún así terminan por renunciar pues cuando el victimario se cansa de ellas o ya obtuvo lo que quiso, dejan de serles ‘útiles’ y les hacen la vida difícil”, explicó una empleada de recursos humanos de una reconocida empresa.
Hay acosadores que en algún momento han sido víctimas y a pesar de ello, continúan afectando a más personas.
¿QUIÉN LAS CUIDA?
En marzo 2014 el Senado de la República reformó el Código Penal Federal para sancionar con multa de 40 días de salario mínimo a quien cometa acoso sexual laboral y en caso de que se trate de un superior jerárquico, además de la multa se le aplicará despido de su cargo o empleo.
Para Mario Alberto José de los Santos el hostigamiento sexual es una patología obsesiva conductual y que es generalizada en una gran medida entre la clase política. “Es muy común en la clase política pues generalmente no tienen vigilancia y supervisión y además lo hacen con una forma de refrendar su estatus de macho alfa”, dijo el doctor en psicología.
Vivimos en una sociedad muy sexualizada, no es nada fuera de lo común que el sexo se utilice para escalar o para obtener ventajas de género. Es obligación de todas las instituciones enfocadas a estos temas defender y proteger a la víctima.
En la Subprocuraduría de Atención a Víctimas del Delito, su titular Ricardo Turrubiartes Vargas señaló que atienden con frecuencia casos de acoso sexual y se da atención especializada a las víctimas.
En el Centro Sí, Mujer Saltillo se colabora con otras instancias tales como la Subprocuraduría de Atención a Víctimas del Delito, la Pronnif y el Centro de Justicia y Empoderamiento de las Mujeres.
Oralia Santibañez, titular del Centro, explicó que una de las principales problemáticas que enfrentan es cuando las víctimas de estos delitos, de acoso sexual, llegan a acostumbrarse a ser víctimas: “Hemos enfrentado casos en que una misma víctima está afectada en dos o tres empleos que ha tenido, ha cambiado de empleo y al final terminó por adaptarse y aceptar que su condición de mujer la lleva a ser acosada”.
Agregó que otra problemática es cuando las empresas en donde se ha señalado la presencia de acosadores los conservan en su cargo y puesto a pesar de que por culpa de ellos se tiene una constante rotación de personal femenino.
¿QUÉ ES ACOSO?
> El acoso sexual implica violencia recurrente o sistemática sobre otra persona y que ésta le cause perjuicio profesional, daño profesional, económico o sufrimiento psicológico o físico.
Acoso sexual en cifras:
> En todo México, durante 2015 se cometieron 778 mil delitos sexuales contra las mujeres, a razón de 2131 agresiones por día.
> Oaxaca es el estado con mayor número de amenazas sexuales.
> Entonces, cada hora se cometen 68 delitos sexuales en todo el país.
> Ocho de cada 10 mujeres son víctimas de violencia sexual.
> Siete de cada 10 mujeres sufren acoso sexual laboral, el 60% de estas mujeres deciden renunciar y el 25% sufren despido.
Y en Saltillo…
> 75% de las usuarias del transporte público sufren acoso sexual.
> 40% cambiaron su vestimenta para evitar problemas.
> 25% de las mujeres fueron fotografiadas o filmadas sin su permiso.
Fuente: INEGI