¡Se acabó todo!, Brasil se estremece luego del incendio en el Museo Nacional

Usted está aquí

¡Se acabó todo!, Brasil se estremece luego del incendio en el Museo Nacional

El Museo Nacional se encuentra destrozado después de un incendio nocturno en Río de Janeiro, Brasil. Foto: AP
La Unesco ofreció a las autoridades brasileñas toda su experiencia disponible en materia de protección y conservación del patrimonio cultural para "tratar de atenuar las consecuencias de este drama".

Un día después de la "tragedia cultural", como la denominaron varios especialistas, las causas que provocaron el incendio y la destrucción del Museo Nacional de Brasil siguen sin conocerse. Lo que sí se sabe, en cambio, es que casi todo el acervo contenido en el recinto fue consumido por las llamas.

"Se acabó todo", manifestó el museólogo Marco Aurelio Caldas tras entrar al predio, que un día antes albergaba la institución científica más antigua de Brasil y que fue devastado tras un incendio que comenzó en la noche del domingo y sólo fue controlado por la madrugada.

De esa lapidaria sentencia formaban parte presumiblemente la gran mayoría de las 20 millones de piezas que constituían el patrimonio del museo, incluyendo el cráneo de "Luzia", como fue bautizado el fósil de Homo Sapiens más antiguo encontrado en América del Sur.

Además de "Luzia", otras piezas invaluables que, casi con total certeza, se perdieron con las llamas incluyen frescos encontrados en la ciudad italiana de Pompeya, sepultada por la erupción de un volcán en el año 79, fósiles de dinosaurios, objetos arqueológicos de diversas culturas, más de 400,000 ejemplares de libros de estudio y la mayor colección egipcia de América Latina, que incluía momias del antiguo imperio africano.

Los bomberos rocían agua en la fachada del Museo Nacional en Río de Janeiro, Brasil. Foto: AP

El presidente de Brasil, Michel Temer, quien el domingo había lamentado la "pérdida incalculable",  anunció, por medio de una nota oficial, que se creará una red de apoyo económico para la reconstrucción del museo, que incluye entidades de crédito públicas y privadas.

Durante toda la jornada, y mientras lo que quedó del museo se encuentra clausurado para realizar pericias y labores policiales, se registraron manifestaciones en la zona, en protesta por la poca importancia que el Gobierno le otorga a la ciencia y por el abandono en que se encontraba la institución.

Las fuerzas de seguridad, que están apostadas a las afueras del parque en el que se ubicaba el museo, reprimieron de forma violenta y con gas pimienta a lo manifestantes que querían acercarse al recinto. Al final, éstos decidieron realizar un abrazo simbólico alrededor del vallado.

Si bien la gran mayoría de las piezas del museo se perdieron (sólo habrían quedado los meteoritos), el principal objetivo de los cuerpos de rescate pasa ahora por mantener en pie la estructura edilicia del edificio, que fue construido hace más de 200 años cuando Brasil todavía no había obtenido la independencia de Portugal.

A la hora de mencionar las causas que derivaron en el devastador incendio, sólo fueron difundidas dos hipótesis por los principales medios del país.

Los bomberos caminan sobre escombros dentro del Museo Nacional después de un incendio nocturno en Río de Janeiro, Brasil. Foto: AP

De acuerdo al testimonio del ministro de Cultura Sergio Sá Leitao publicado por el diario "Folha de Sao Paulo", la primera consiste en la caída de un pequeño globo aerostático no tripulado en el techo del edificio. Los "baloes", como se conoce en Brasil a estos objetos, son impulsados por combustión, se suelen utilizar en fiestas y ya provocaron otros incendios en el país.

La segunda teoría, indicada por el mismo periódico, refiere a un posible cortocircuito desatado en la sala de audiovisuales del recinto.

Más allá de sus causas, de todas formas, la atención luego del siniestro derivó hacia la falta de cuidado y conservación del museo, lo que resultó en su deplorable estado y podría haber influenciado también en la propagación del fuego.

Roberto Robadey, comandante general del cuerpo de Bomberos, explicó al diario "O Globo" que el predio no poseía un sistema adecuado de prevención y detección de incendios. Encima, según admitió, existió una demora de 40 minutos en el combate contra las llamas porque los carros hidrantes de la zona no contaban con la presión suficiente para ser utilizados.

Roberto Leher, rector de la Universidad Federal de Río de Janeiro (UFRJ), de la que dependía el museo, contó que la institución estaba esperando un préstamo del Banco Nacional de Desarrollo (BNDES) de 21 millones de reales (aproximadamente cinco millones de dólares) para instalar el sistema anti-incendios.

Bomberos sacan escombros carbonizados del Museo Nacional después de un incendio nocturno en Río de Janeiro, Brasil. Foto: AP

Por su parte, Roberto Gambine, director de finanzas de la UFRJ, manifestó que el presupuesto del Gobierno para la universidad cayó 62 millones de reales en los últimos cuatro años (de 450 a 388) y que así la institución no puede hacerse cargo de los predios que debe administrar.

"Los predios históricos necesitan recursos para poder ser mantenidos. Y en Brasil, no los disponen", se lamentó Alexander Kellner, director del Museo. Luego, consultado sobre si la tragedia había sido preanunciada por la falta de dinero disponible para la manutención del recinto, respondió: "Era un escenario probable”.

Varios relatos subidos a redes sociales describen que, en los últimos tiempos, la desidia respecto al museo era notoria y se notaba en su estructura edilicia, con paredes sucias, rotas, diversas faltas de cuidados y salas cerradas a la exposición.

También por medio de las redes, varias personas comenzaron campañas llamando a que los visitantes del museo compartan sus fotos en la institución, para que no se pierda la memoria histórica del lugar.

Ejército rodea el Museo Nacional de Brasil para impedir saqueos

El Ejército brasileño formó un cerco alrededor de las ruinas del Museo Nacional, que se incendió el domingo en Río de Janeiro, para evitar que se produzcan saqueos de valiosas piezas que podrían haber resistido al fuego.

Según el diario "O Globo", además el cerco se realizó para facilitar el trabajo de los bomberos, ya que aún persisten algunos focos menores en el predio.

A pesar de que en un principio se creía que todo el acervo del museo había sido consumido por el fuego, en las últimas horas surgieron algunas esperanzas de que ciertas piezas de valor podrían haberse salvado de las llamas, y por eso las Fuerzas Armadas pretenden protegerlas ante posibles robos.

De las 20 millones de piezas que componían el patrimonio de la institución, se estima que el 90 por ciento fueron destruidas, según informó Cristiana Serejo, vicedirectora del museo, el lunes por la noche. Entre el 10 por ciento que podría haber resistido existen esperanzas de que se encuentre el cráneo bautizado como “Luzia".

Según la versión de la funcionaria, "Luzia", el fósil de Homo sapiens más antiguo hallado en América del Sur, estaba guardado en un cofre de acero que aún no fue encontrado y por eso se presume que podría estar bajo los escombros.

En cambio, la colección egipcia del museo, la más importante de América Latina, se perdió por completo, confirmó el geógrafo Renato Cabral Ramos, que ingresó al recinto.

El voraz incendio que destruyó el Museo Nacional comenzó el domingo por la noche y se extendió hasta la madrugada del lunes. Las llamas consumieron lo que era la institución científica más antigua de Brasil y una de las más importantes del continente.

* Dudas sobre causa y qué se salvó en incendio en museo en Río

Investigadores y forenses esperaban poder acceder el martes al Museo Nacional de Brasil, en Río de Janeiro, que quedó destruido en un incendio, para descubrir cómo comenzaron las llamas y qué queda de los 20 millones de artículos que hacían de él uno de los más importantes de América Latina.

Luego del fuego que arrasó el museo el domingo, los ingenieros estaban realizando pruebas en la estructura para asegurarse de que no se vendrá abajo. Las autoridades mostraron preocupación el lunes por la fragilidad de paredes internas y de parte del techo.

Estudiantes y personal del Museo Nacional protestan frente a la institución que sufrió un incendio nocturno en Río de Janeiro, Brasil. Foto: EFE

El museo contenía la mayor colección de artículos históricos y científicos de Latinoamérica, y las autoridades sugirieron que los daños podrían ser catastróficos. Un funcionario dijo a un medio brasileño que hasta el 90% de su acervo podría haber quedado destruido.

Por el momento se desconoce la causa del incendio. La policía federal asumirá la pesquisa ya que el museo formaba parte de la Universidad Federal de Río de Janeiro. Pero manifestantes, comentaristas y los propios directores del museo señalaron que los años de abandono gubernamental habían dejado el centro con tan pocos fondos que su personal tuvo que recurrir a cibersitios de crowdfunding para poder abrir exposiciones. En otro ejemplo de los problemas que atraviesan los servicios públicos en el país, inicialmente los bomberos tuvieron problemas para contener las llamas porque las bocas de riego próximas al inmueble no funcionaban. En su lugar, hubo que llevar agua en camiones desde un lago cercano.

Roberto Leher, rector de la Universidad Federal de Río de Janeiro, dijo que era bien sabido que el inmueble era vulnerable al fuego y que necesitaba amplias reparaciones. De hecho, recientemente se aprobó una partida de casi cinco millones de dólares para una renovación ya prevista, que incluía la mejora del sistema de prevención de incendios, pero el dinero aún no se había desembolsado.

Un oficial de policía balancea su batuta contra los estudiantes que protestan y contra el personal del Museo Nacional que intentan ingresar a la propiedad del museo después de un incendio nocturno en Río de Janeiro, Brasil. Foto: AP

Las autoridades prometieron el ayer 2.4 millones de euros para apuntalar el edificio y se comprometieron a reconstruir el museo.

"Los que están diciendo que el museo será reconstruido no dicen la verdad”, manifestó Luiz Philippe de Orleans e Braganca, heredero del último emperador de Brasil. "El edificio podría reconstruirse, pero la colección nunca podrá reconstruirse. Doscientos años, trabajadores, investigadores, profesores que se dedicaron en cuerpo y alma (al museo)... el trabajo de su vida se quemó por la negligencia del estado brasileño”.

El museo, cuyo edificio principal fue en su día el hogar de la familia real, tenía un gran número de especímenes paleontológicos, antropológicos y biológicos. También contenía una calavera llamada Luzia, que era uno de los fósiles más antiguos hallados nunca en América, una momia egipcia y el mayor meteorito descubierto en Brasil, que es uno de los pocos objetos que las autoridades confirmaron que sobrevivió a la tragedia. Parte del catálogo estaba guardado en otras partes y se salvaron de ser pasto de las llamas.

Luiz Fernando Dias Duarte, subdirector del museo, apuntó que posiblemente que todo lo que estaba guardado en el edificio principal se quemó, y Cristiana Serejo, otra subdirectora del centro, contó al cibersitio de noticias G1 que alrededor del 10% de la colección sobrevivió al incendio.

Estudiantes y empleados del Museo Nacional protestan fuera de la institución después de que fue destruida por un incendio durante la noche en Río de Janeiro, Brasil. Foto: AP

Para muchos en Brasil, el estado del museo de historia natural, con 200 años de antigüedad, se convirtió rápidamente en una metáfora de lo que consideran la decadencia de la cultura y la vida brasileña tras años de corrupción, crisis económica y mal gobierno.

Brasil ha intentado salir de una recesión de dos años y ha visto como su élite política y empresarial era encarcelada en el mayor caso de corrupción de América Latina. Las divisiones políticas se acentuaron además con el juicio político y posterior destitución de la expresidenta Dilma Rousseff.

Unesco ofrece ayuda para reconstruir museo brasileño

La destrucción del Museo Nacional de Brasil por un voraz incendio el pasado fin de semana es "una pérdida de una herencia cultural inestimable para la Humanidad entera", deploró la directora general de la Unesco, Audrey Azoulay, en París.

La Unesco ofreció a las autoridades brasileñas toda su experiencia disponible en materia de protección y conservación del patrimonio cultural para "tratar de atenuar las consecuencias de este drama", indica el comunicado.

El museo era un "un símbolo de la vivacidad de los lazos entre la cultura y la investigación, y de la memoria brasileña", agrega el documento.

Las llamas del incendio provocado por causas no establecidas destruyeron gran parte de las 20 millones de piezas que constituían el patrimonio del museo, considerado uno de los centros culturales más importante de América del Sur por sus colecciones paleontológicas, arqueológicas, geológicas y botánicas.

* Con información de la Agencia AP