El actor Rupert Grint perdió una apelación en la que pidió el reembolso de 1.3 millones de euros que pagó en impuestos en 2011.

Los contadores del actor intentaron cambiar, a través de una apelación, la fecha de ocho meses de ingresos del actor en 2011 al año fiscal 2009-2010, antes de que la tasa de un impuesto subiera del 40 al 50 por ciento.

Esto tenía la finalidad de que el actor obtuviera la devolución de 1.3 millones de euros, una décima parte de las ganancias totales que recibió en 2011, cuando aún filmaba la saga de 'Harry Potter'.

Sin embargo, la jueza Barbara Mosedale negó la petición de sus contadores de cambiar las fechas de sus ingresos, lo que significa que el actor de 27 años no podrá recuperar esa cifra.

Mosedale alegó que los contadores de Grint fallaron al cumplir con los requisitos de la ley.

"Aceptamos que tiene el derecho de cambiar las fechas de sus ingresos. Nuestra única preocupación es si lo hizo dentro del margen de la legislación", dijo la jueza al diario 'The Guardian'.

Sin embargo, Mosedale aclaró que el actor no incurrió en evasión fiscal, puesto que ya había realizado el pago del impuesto.