El titular de la Secretaría de Medio Ambiente y Recursos Naturales (Semarnat), Rafael Pacchiano desconoció la nueva estimación que hizo el Comité Internacional para la Recuperación de la Vaquita (CIRVA), de que sólo quedan 30 ejemplares del mamífero marino más amenazado del mundo, debido a que continúa la pesca ilegal de pez Totoaba en el Alto Golfo de California o Mar de Cortés.

En entrevista, Pacchiano Alamán cuestionó el método que utilizó el grupo de científicos de gran prestigio para hacer el nuevo cálculo de población de la vaquita marina, al señalar que en esta ocasión no se realizó un crucero con hidrófonos y binoculares de alta potencia, como ocurrió en 2015 cuando se determinó que la población era de 60 ejemplares.

El encargado de velar por la biodiversidad del país advirtió que se debe hacer un estudio con la misma metodología y "comparar peras con peras".

"En este estudio de las 30 vaquitas, no se utilizó ni la infraestructura que se utilizó para determinar el número de 60, ni tampoco se realizó la inversión. Nosotros para poder determinar las 60 vaquitas junto con el CIRVA invertimos más de 50 millones de pesos, hubo dos embarcaciones con observadores, se pusieron más de 150 hidrófonos, y con eso se determinó con un rango de error muy reducido que habían 60 vaquitas, este número de 30 ejemplares lo obtienen utilizando metodologías totalmente diferentes, por lo tanto yo digo que sería importante hacer un estudio con las mismas metodologías y comparar peras con peras", indicó.

Al ser cuestionado sobre la posibilidad de decretar una veda total en el uso de redes en el hábitat de la vaquita marina, el titular de la Semarnat recordó que hay una prohibición vigente que concluye en mayo, y se estudia la posibilidad de levantar la restricción en coordinación con la Secretaría de Agricultura, Ganadería, Desarrollo Rural, Pesca y Alimentación (Sagarpa)

"Ahorita junto con la Sagarpa estamos analizando si se puede levantar la veda, dado que ya hay artes de pesca alternativas o si necesitamos más meses para terminar de desarrollar artes de pesca de camarón y escama, para la pesca legal", señaló.

Rafael Pacchiano Alamán rechazó que se haya tirado dinero a la basura con el pago de mil 50 millones de pesos como compensación a pescadores, permisionarios y cadena productiva de San Felipe, Baja California y el Golfo de Santa Clara, Sonora, para que supuestamente sacaran sus redes del mar, con el fin de evitar la mortandad de la vaquita marina.

Aseguró que la captura de camarón se encuentra bajo control en la región y no hay una sola red de pescadores legales en el agua.

Excélsior publicó el 28 de marzo de 2016 que policías municipales de Sonora mataron en un enfrentamiento a José Isaías Armenta Armenta, pescador relacionado con el tráfico ilegal de pez Totoaba, que al mes recibía casi 100 mil pesos del gobierno federal como pago de compensación por la veda en el uso de redes en el Alto Golfo de California.

El “compa Pepe” era conocido como “buchero” en el Golfo de Santa Clara por sus actividades de pesca furtiva y de acuerdo con el padrón de beneficiarios elaborado por la Secretaría de Desarrollo Social (Sedesol) obtenía pagos mensuales de 99 mil 774.22 pesos.