‘Que su legado no sea de tristeza, sino de alegría’, el padre Pantoja nunca se dejó vencer

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‘Que su legado no sea de tristeza, sino de alegría’, el padre Pantoja nunca se dejó vencer

Impacto. El cura tan querido y respetado no pudo ser despedido por la gente que le tenía tanto afecto, ya que fue incinerado. ARCHIVO
Aún en los peores momentos de la enfermedad, el sacerdote luchó con entereza; piden amigos y familiares guarden el mejor recuerdo de él

El padre Pantoja se fue luchando, así lo recalcan en la Casa del Migrante, donde por décadas trabajó por los derechos humanos y la dignificación de los migrantes que llegaban a Saltillo en su camino a Estados Unidos en busca del sueño americano.

Ayer, tras el fallecimiento la noche del viernes pasado de Pedro Pantoja Arriola, el también colaborador de la Casa del Migrante de Saltillo “Casa Belén”, Alberto Xicoténcatl, recordó al sacerdote como un guerrero incansable en la asociación y la Comunidad de la Santa Cruz.

Alberto Xicoténcatl compartió en entrevista para VANGUARDIA, que el padre Pantoja decidió hasta el último momento hacerle frente al COVID-19, aceptando ser internado y posteriormente intubado para dar la lucha contra la enfermedad, como lo hizo por años contra otras enfermedades y las injusticias.

“El día de ayer (viernes) estábamos muy tristes, el día de hoy (sábado) me parece que hemos amanecido de mucho mejor ánimo, más tranquilos y reflexionando de cómo el padre Pedro fue un hombre que vivió al máximo y que no le gustaba estar triste, por eso estamos haciendo un esfuerzo enorme por sobreponernos y para que su legado no sea de tristeza, sino de la misma alegría y muchísimas ganas de vivir que siempre tuvo”, dijo.

Incógnita. Los familiares del sacerdote aún no revelan dónde será colocada la urna con sus cenizas. ESPECIAL

UN SOLDADO DE DIOS

Pantoja Arreola fue multifacético, lo mismo oficiaba un misa, confesaba, visitaba las cárceles y daba consejos, que acarreaba y cargaba bultos de frijol, verdura, cartones de huevo, lo que fuera, para dar de comer a los que llegaban al refugio.

Tenía el respeto y la admiración de sus colegas, casi todos lo conocían, porque fue un clérigo que luchó siempre contra las injusticias.

Consagró más de medio siglo de su vida al sacerdocio. Era un hombre muy preparado, estudió Ciencias Sociales y hasta un posgrado. Dominaba el inglés, era un erudito, siempre traía un libro para leer en cuanto se daba un poco de tiempo: “solo soy un humilde siervo de Dios” solía responder cuando se le pedía opinión de sus cargos en la Iglesia y grupos altruistas.

A ORAR POR SU ALMA

Hoy domingo, el obispo emérito Raúl Vera oficiará una misa que será transmitida a través de las redes sociales en memoria del padre Pantoja, quien murió víctima del coronavirus.

“La Diócesis va a realizar una misa que será transmitida vía redes sociales por sus cuentas de YouTube y Facebook y el Facebook de la Casa del Migrante de Saltillo. La misa será celebrada al mediodía y los demás espacios serán privados con la familia”, dijo.

Hoy mismo, las cenizas del padre Pedro Pantoja serán llevadas por la tarde a la Casa del Migrante para que los colaboradores del albergue y migrantes que allí habitan le den el último adiós.