Países Bajos. 15 de junio – En las aguas heladas del Mar del Norte, viajeros pescan miles de artículos basura en sus redes. Pero el 30 de mayo no fue uno de esos días cuando un bote atrapó en el Gancho de Holanda una criatura jamás vista por el hombre. Un animal marino de dos cabezas y 60 centímetros de largo.

Una fotografía de dicho animal comenzó a circular por los Países Bajos, hasta llegar a las manos del curador de mamíferos del Museo Natural de Historia de Rotterdam, Erwin Kompanje.

Tras una investigación, Kompanje descubrió que se trataba de dos marsopas siamesas quienes compartían un mismo cuerpo, lo cual resulta una gran rareza en el mundo marino.

“Solo se han registrado nueve casos hasta ahora” dijo el curador quien ha estudiado a delfines, ballenas y marsopas durante veinte años “Aún los gemelos son raros; no hay suficiente espacio en el vientre de la madre para contener a más de un bebé”.

Muchos de los hallados han sido fetos sin desarrollarse, como fue el caso de delfines con dos cabezas o cuerpos en las costas de Japón.

Tras analizar con detalle las fotos, Kompanje dedujo que se trataba de dos marsopas macho recién nacido, puesto que aún no había desarrollado su aleta dorsal y pequeños pelos que se pierden poco después del parto se podían ver en ambas caras debajo de la aleta.

Los hermanos no habrían podido sobrevivir debido a que sus cerebros los harían nadar en direcciones distintas o el corazón fallaría por no poder suministrar suficiente sangre al cuerpo, pero es posible que vivieran unos momentos antes de morir y ser atrapados.

Para la decepción del curador, el pecador danés que atrapó a la criatura reveló que solo tomaron cuatro fotografías antes de volver a soltarlo en el mar por temor a que se tratase de una pesca ilegal, por lo que el recuperar a la criatura no será posible.

“Para un investigador de cetología, esto es un verdadero horror” exclamó Kompanje asombrado por el descubrimiento.