La organización del proceso electoral 2020-2021, que inicia hoy, estará marcada por la pandemia de covid-19, la que obligará a tomar medidas inusuales para mitigar riesgos.

Sin embargo, consejeros electorales y especialistas en la materia coincidieron en que el INE no tendrá posibilidad de posponer los comicios de 2021, en los que 21 mil cargos de elección popular estarán en juego, ni podrá realizar la votación de forma remota.

Para expertos como el consejero José Roberto Ruiz Saldaña, no habrá un “plan B” respecto a las elecciones intermedias, en las que podrán participar más de 94 millones de ciudadanos, ya que actualmente el voto por internet no es confiable al 100% y, en palabras de Luis Carlos Ugalde, extitular del extinto IFE, cambiar la fecha de los comicios sería un “ejercicio de riesgo”.

Piden no atar comicios a ciclo de la pandemia; ANTICIPAN MEDIDAS INUSUALES

Para el Instituto Nacional Electoral (INE) no habrá plan B ni posibilidad de posponer las elecciones intermedias, o de hacerlas de manera diferente a la establecida por la Constitución, coincidieron en señalar el consejero del INE José Roberto Ruiz Saldaña y los expertos electorales Marco Baños y Luis Carlos Ugalde.

Hoy lunes da inicio el año electoral 2020-2021, el primero en el que concurren 30 elecciones locales más la elección de diputados federales, con un listado nominal de más de 94 millones de ciudadanos y más de 21 mil cargos de elección popular en disputa.

Año electoral que, se vislumbra, estará caracterizado por hechos inéditos ante la pandemia de covid-19 que obliga a tomar medidas inusuales, como destinar 380 millones de pesos para otorgar seguridad e higiene en las casillas.

Ante este panorama, el INE enfrentará seis retos, en los que, en algunos de ellos, coincidieron José Roberto Ruiz Saldaña, Luis Carlos Ugalde y Marco Baños, pero en lo que hubo plena coincidencia es en la imposibilidad de posponer los comicios como ocurrió en Coahuila e Hidalgo o tratar de realizar la votación de forma distinta a la presencial.

“No podría haber plan B sobre el 6 de junio del 2021 porque lo que hay y hemos visto es que hay muchas maneras de mitigar los riesgos… El plan “A” es que haya elecciones el 6 de junio del 2021, y lo que hemos estado haciendo todo este tiempo con la institución es prepararnos; incluso las elecciones de Coahuila e Hidalgo que son el próximo 18 de octubre de 2020 nos están sirviendo bastante porque nos dimos cuenta cómo tenemos que salir a campo”, dijo el consejero Ruiz Saldaña quien preside la Comisión de Organización y Capacitación Electoral.

Marco Baños apuntó: “No veo que el aventar las elecciones para adelante pudiera ser un plan B, yo quisiera pensar un poquito con optimismo”, mientras que el director de Integralia, Luis Carlos Ugalde coincidió y agregó que “cambiar la fecha de la elección, de 30 elecciones locales más una elección federal, sería un ejercicio de enorme riesgo, creo que sería someter el ciclo democrático a una pandemia”.

Los tres entrevistados descartaron el uso del voto por internet, debido a que se necesitan modificaciones constitucionales y pruebas de cuando menos tres años, para poder voltear a esa opción, además de que Ugalde Ramírez externó su disgusto por el voto por internet “primero por el tema de seguridad. No existe todavía en el mundo un mecanismo que permita tener certeza de su confiabilidad”, y segundo, porque la democracia se hace en la plaza pública.

1.-Lograr el presupuesto necesario en un contexto de crisis económica.

Para el experto en temas electorales y exconsejero del INE Marco Baños éste será uno de los retos a enfrentar por las autoridades electorales porque “hay una disputa permanente por el costo de las elecciones y que las autoridades consumen muchos recursos de carácter público” por lo que habrá que observar qué sucede con los 20 mil millones que solicitará el INE, de los cuales ocho mil 200 irán para elecciones.

2.- La elección en el contexto de la pandemia. 

El INE tendrá que buscar a más de 12 millones de ciudadanos en un contexto de pandemia que obligará a cambiar las formas, aumentar gastos para higiene y modificar procedimientos para evitar que la organización electoral se convierta en un transmisor del covid-19.

Para muestra un botón. El presidente de la comisión de Organización y Capacitación del INE, José Roberto Ruiz, explicó que contratarán a poco más de 41 mil capacitadores electorales (Caes) y explicó que “hacemos un reclutamiento muy estricto porque es parte de la certeza, los exámenes van a ser con menos reactivos, para no tener a tantas personas, tanto tiempo en salones de clases, e incluso vamos a hacer exámenes en dos días para evitar aglomeraciones. Eso no se hacía antes.”

El INE presupuestó más de 15 millones de pesos para insumos que utilizarán los Caes para protección de ellos mismos y los ciudadanos que visiten.

“Nosotros estamos pensando que los meses que estaremos en proceso electoral 20-21 estaremos en pandemia. Si se va antes, qué mejor, si disminuye antes, que mejor, pero estamos preparando que hasta incluso el día de la jornada todavía tuviéramos que estar con estos niveles de cuidado, mitigación de los riesgos”, dijo el consejero.

En tanto, Luis Carlos Ugalde alertó que “en los últimos 20 años la tasa de rechazo de ciudadanos que son seleccionados para fungir como funcionarios ha aumentado, ya es un problema estructural y esto puede ser más grave en este entorno que muchos digan que no aceptan”.

Para Marco Baños, el reto durante la jornada electoral estará en mantener “la sana distancia”, pues en su experiencia en las elecciones de República Dominicana encontró que “había lugares donde se observaba bien la sana distancia, pero había lugares en donde veías a las personas casi casi abrazadas en una casi reunión”.

Tanto Ruiz Saldaña como Baños Martínez subrayaron que la experiencia que se tenga en Hidalgo y Coahuila el próximo 18 de octubre permitirá ver si los protocolos de seguridad e higiene tienen éxito.

Para esto, el consejero del INE mencionó que será un desafío coordinarse con 32 Órganos Públicos Locales Electorales, cosa que ya ha sucedido, pero no en el contexto de la pandemia “y nunca en esta dimensión”.

La seguridad e higiene tendrá que lograrse también en las campañas en las que Luis Carlos Ugalde puntualiza que “los partidos tendrán que abstenerse de realizar grandes concentraciones. Buena parte de la discusión tendrá que ser a través de redes sociales, la televisión y la radio”.

Por otra parte, Marco Baños considera un desafío el actualizar el padrón para que todos los ciudadanos puedan participar y que los candidatos y candidatas puedan tener credenciales vigentes para solicitar su registro, luego de varios meses en los que se cerraron los módulos.

En adición menciona la importancia de ampliar las pruebas piloto para seguir probando la urna electrónica y el voto por internet.

3.-Regulación del proceso, especialmente con el presidente López Obrador.

El director de Integralia, Luis Carlos Ugalde, explicó que el comportamiento del presidente López Obrador puede ser el “mayor desafío” que se le puede presentar al INE porque el primer mandatario tiene “una suerte de incontinencia verbal y eso puede poner en una suerte de riesgo y de  ambiente polarizante a las campañas, y por las restricciones que debe cumplir, se querrá quejar”, como por ejemplo suspender las mañaneras mientras duran las campañas, abstenerse de estar dando opiniones sobre temas electorales, “de alguna manera López Obrador va a ser  como Vicente Fox y esto es paradójico, porque López Obrador acuñó una frase memorable en el 2006 que era ‘cállate, chachalaca’ y ahora se le va a tener que aplicar al presidente la misma frase que él le dijo a Fox”.

4.-La reelección legislativa

En 2021 se permitirá la reelección legislativa, pero el Congreso no realizó la normatividad para regular ese mandato constitucional. 

El presidente del INE, Lorenzo Córdova, ha dicho que ante tal omisión, el Instituto tendrá que reglamentar, por ejemplo, si los diputados que quieran reelegirse tendrán que solicitar licencia para hacer campaña, o podrán hacerla ejerciendo el cargo, sobre todo para cuidar la equidad en la contienda y evitar el uso de recursos públicos en sus campañas.

En contraste, el consejero Ruiz Saldaña aseguró que “ya se cumplieron los 90 días que la Constitución ordena de no emitir normas fundamentales y, emitir unas normas de esa naturaleza me parecería, si no temerario, si preocupante. Así como se le pasó el tiempo al Congreso pienso que mis colegas no tendrían que estar queriendo emitir normatividades de ese tipo”.

5.-Vencer al abstencionismo ante covid-19

Mientras en el mundo se han dado experiencias diferenciadas en el tema de participación ciudadana, explicó el especialista Marco Baños, en México podría afectar si para junio no se tiene una vacuna y “evidentemente estará en partidos y autoridades la obligación de desplegar una intensa campaña de información para que el protocolo sanitario genere confianza a los electores”.

En tanto, para Luis Carlos Ugalde y José Roberto Ruiz Saldaña, la participación podría superar las expectativas.

“Yo no veo que ese sea un problema la participación electoral. De hecho, yo creo que la elección como es tan grande e incluye a 15 gobernadores y además vamos a tener un Presidente muy activista y vamos a tener un electorado muy polarizado, es probable que la elección tenga una alta participación en comparación a otras elecciones intermedias”, consideró Ugalde Ramírez, mientras que Ruiz Saldaña apuntó que como se renovarán cerca de dos mil alcaldías y 15 gobernaturas “yo creo que para el 6 de junio —quiero ser optimista— la participación no estaría disminuyendo porque hay bastantes incentivos para dicha participación.”

6.-Mejorar la fiscalización del efectivo.

Luego de los videos en los que se ve la entrega de dinero en efectivo a colaboradores de exsenadores panistas, las declaraciones de Emilio Lozoya en el caso Odebrecht sobre sobornos para la campaña del expresidente Enrique Peña Nieto y el video en el que Pío López Obrador recibe dinero de David León, tanto Marco Baños como Luis Carlos Ugalde, subrayan el reto para el Instituto Nacional Electoral de encontrar la manera de fiscalizar de mejor manera el flujo de efectivo en las campañas.

“Es de vital importancia. Creo que el INE tendrá que hacer algunos ajustes; hay razón en decir que una buena parte del efectivo no se ha podido fiscalizar, el instrumento del INE no ha sido suficiente, pero también hay criterios jurisdiccionales que impiden que se castiguen una serie de actos que tienen que ver con el efectivo”, dijo Marco Baños.

Ugalde señaló que este problema “ha sido más visible ahora, que es tratar de contener el financiamiento ilegal de las campañas, el dinero bajo la mesa que fluye en efectivo, y que incluye a todos los partidos. En este tema el INE puede hacer poco, es un fenómeno estructural, invisible, difícil de detectar, pero este es otro problema que se va a presentar de forma muy aguda el próximo año”.