Orlando, del coma profundo a la lucha por la vida (testimonio del CRIT)
El Centro de Rehabilitación Teletón es conocido por su trabajo a favor de la rehabilitación de niños discapacitados, con leucemia y cáncer, sin embargo, desde hace dos años atienden también a adultos, ejemplo de esto es Orlando Sánchez Félix, quien viaja desde Culiacán para ser atendido en Saltillo luego de que una golpiza que lo privara de sus facultades motoras.
Los trabajos de la institución de asistencia privada iniciaron en 1997 y estaban enfocados especialmente a niños, pero al ver que con los años seguían necesitando de sus instalaciones y tecnología de punta pensaron en abrir más sus filtros, sin dejar a los niños fuera.
Orlando Sánchez fue una de las razones que motivó a que el CRIT Coahuila fuera uno de los primeros en recibir nuevos pacientes mediante el esquema de “Pacientes Externos”. Él, cuando tenía 16 años, fue golpeado en la calle cuando iba a tomar una clase de música en el centro de Culiacán.
“Cuando llevamos a mijo al hospital ya no tenía posibilidad de vida, me dijo el doctor; fueron tres meses que estuvo internado en estado crítico, a diario veía que decía en el pizarrón ‘grave, grave’, duró 21 días en terapia intensiva, 3 meses y medio en piso y lo saqué con una desnutrición de tercer grado, una traqueotomía, una sonda para alimentarlo, una para orinar, él era un muerto que respiraba”, platicó Amada Sánchez Félix, dijo que nunca supieron quién lo atacó, pero permaneció en coma hasta que cumplió 17.
Orlando reaccionó cuando sus compañeros de prepa fueron a visitarlo por su cumpleaños, pero no sabía quién era o quienes lo rodeaban, solo reconocía a su madre. Lo único que podía mover eran los ojos, pero así comenzó a comunicarse.
“El neurólogo le dijo que hiciera una señal con los ojos si le entendía y él dijo que sí, a partir de eso él se quiso ir comunicando más y empezó a mover un dedo”, recordó Sánchez, quien platicó que utilizaban un abecedario de hule espuma para comunicarse y esto demostró que su condición solo limitaba sus movimientos, pero sus procesos cognitivos funcionaban completamente.
Poco a poco Orlando fue utilizando una pluma, después la computadora, todo el tiempo él estuvo pidiendo ser atendido en un CRIT, pero su madre sabía que ya era mayor para poder recibirlo. Escribió a todos los centros Teletón, pero solo Saltillo le abrió las puertas.
Desde el 30 de enero del 2006 los Sánchez Félix se organizan para viajar a Saltillo y recibir su terapia.
“Gracias a CRIT yo lo tengo, porque le quedaron muchas secuelas que allá (en Culiacán), no le detectaron y aquí se las descubrieron, con sus terapias él fue mejorando y a la fecha, bendito Dios, yo no tengo palabras para agradecer a todo el personal de aquí todo lo que han hecho por mijo”.
Ellos están trabajando en tener un plan de vida, no solo centrado en una discapacidad”.
Nos dimos cuenta con la experiencia y las indicaciones de Naciones Unidas que no podemos confinar a una persona con discapacidad a ser atendido toda su vida en un centro”.
¿Milagro? Según su madre, Orlando era un muerto que solo respiraba; en el CRIT ha experimentado significativos avances.
Voluntarios son parte fundamental del CRIT: Entregado grupo da esperanza a los enfermos
Una sonrisa y mucho amor son los únicos requisitos para trabajar como voluntario en el CRIT, ayer en el día Internacional de los voluntarios. El Centro de Rehabilitación habló sobre la tarea vital que desempeñan sus voluntarios.
Desde 1985 y en honor a su programa de voluntarios, la ONU declaró que el 5 de diciembre se festejaría a todas las personas que entregan su tiempo para ayudar a otras personas desinteresadamente. En el Centro de Rehabilitación Teletón, estas personas son las encargadas de ayudar a los niños y padres de familia que acuden todos los días a recibir atención.
Hasta el momento, el CRIT cuenta con 68 personas que apoyan dándo la bienvenida a los pacientes, ayudándolos con sus cosas o a trasladarse, e incluso cuidarlos en los momentos que no pueden estar con sus padres.
“Es una labor muy bonita, difícil pero que se aprende mucho de las familias y de los niños, a veces pensamos que nosotros vamos a dar algo, sin embargo, nos llevamos más de lo que podemos dar, eso es sin duda una verdad”, asegura Ana Catalina González López, subdirectora de Voluntariado.
La mayor parte de los voluntarios son mujeres, entre ellas se encuentran San Juanita de la Peña, Zoila Reyna y Martha Alicia Cabrera, las primeras 2 llevan 10 años en esta labor humanitaria y la última, 4.
“Llegué a raíz de que quería ayudar a dos niños de mi barrio que tienen discapacidad. Mi intención era venir con mi esposo, traer a los niños y ver que ellos recibieran su terapia, hacernos cargo de su atención. Desgraciadamente los padres no se dejaron ayudar, pero el día que vine a pedir información me gustó mucho ver a los niños, me emocionó mucho”, platicó Martha Alicia Cabrera, maestra jubilada que comentó que su esposo falleció un mes después de que iniciara con su voluntariado, pero esta labor le ayudó a reponerse de su pérdida.
En su caso, San Juanita de la Peña indicó que la doctora Catalina les hizo una invitación en la iglesia a la que asiste y hasta la fecha ha sido “una experiencia muy gratificante, regalar un poco de tu tiempo, pero para ellos es muy gratificante”.
“Somos una familia. Apúntense, vengan, vean las instalaciones y que vean los problemas que tiene la gente, porque gracias a Dios nosotros no pasamos por eso, pero hay muchas muchachas jóvenes que traen a sus hijos”, invitó la madre de familia Zoyla Reyna.
Luchando contra la sombra de la duda, noticias falsas afectaron al Teletón
Raúl Díaz, director médico del CRIT, dijo que los últimos años han sido difíciles para el Centro a causa de las “mentiras y mala información” que ha ensombrecido sus labores.
Díaz ha trabajado desde que el proyecto empezó en el Estado de México. Se dio cuenta cómo la gente en ese momento pensaba que las discapacidades eran contagiosas. Fue llamado a la ONU cuando el presidente Vicente Fox llamó a firmar la convención interamericana para la eliminación de todas las formas de discriminación hacia las personas discapacitadas.
El director médico del CRIT Coahuila también ha tenido que pasar los tragos amargos de la institución, por ejemplo cuando tuvieron que recortar personal por problemas económicos y tuvieron que reducir su capacidad de atención, de recibir a 900 niños, bajaron a 600. Además también persisten rumores que rodean al organismo.
“Desgraciadamente hubo una temporada basada en la mal información, en la mentira y el engaño. Todavía me encuentro a gente que piensa que esto no es real, que es fraude y eso duele porque (aquí todos) son profesionistas, gente muy preparada que viene todos los días y no están haciendo un show de televisión”, indicó Díaz.
“Yo les digo, si tienen duda —que se vale dudar— vengan, acérquense, vean que esto es una realidad y funciona”, finalizó Raúl Díaz.