Monarquía deportiva: Británicos haciendo una revolución
Por: Alejandro Morteo/Karen Vega
El Reino Unido a través de los años ha sido la cuna de distintos deportes que hoy se practican en todo el orbe; futbol, tenis, golf, rugby, críquet, bádminton y squash tienen raíces británicas.
En los últimos años, desde que se llevaron acabo los Juegos Olímpicos del 2012 a la fecha, Inglaterra no ha perdido los reflectores del Mundo y es que no sólo se ha posicionado entre los países más destacados en distintas disciplinas, sino que también han roto récords, llenado sus vitrinas de premios y dominado cualquier prueba que se les ponga enfrente.
Desde el ciclismo, pasando por el futbol, el tenis, así como el rugby y sorprendiendo en el automovilismo, Inglaterra ha llevado su corona a otro nivel.
La invención
Inglaterra no sólo domina al deporte, sino que también se puede considerar creador de algunos de ellos:
Futbol
Con origen en las Islas Británicas, el futbol comenzó una consolidación como el deporte que hoy conocemos desde el año de 1863, cuando en Inglaterra se separó el “Rugby-Futbol” para que cada disciplina tomara su propio camino, con sus determinadas reglas. Se formó la Asociación de Futbol de Inglaterra como el primer órgano gubernativo de este deporte, y así, se comenzó a forjar el reglamento del juego. Iniciando con las Leyes de Cambridge, el futbol fue evolucionando, pasando por estatutos que dictaron, en 1912, impedir a los porteros tocar el balón fuera del área penal; en 1970 a los árbitros implementar el uso de las tarjetas amarillas y rojas, así como en tiempos más recientes, en el año de 1995 la concesión de tres sustituciones en partidos oficiales, y la implementación de la tecnología desde 2006.
Tenis
Hace más de 140 años, en Londres fue registrado el equipamiento y las reglas del tenis, que se han ido adaptando a las creaciones del hombre, así como a él mismo. El Club “Todo Inglaterra”, fundado en 1868, fue donde se jugó tenis en césped por primera vez. El primer torneo, convocado por el Club “Todo Inglaterra” y el equipo “Tenis de Césped” en 1877, consistió en un total de 22 hombres, donde los requisitos para ingresar eran una cooperación de una libra, además de sus propias raquetas y zapatos. Con Wimbledon como sede de los torneos más antiguos del tenis, se formaron los Grand Slam, que sólo aceptaban a jugadores novatos hasta 1968, dos años más tarde, las competencias se unificaron alrededor del mundo, lo que provocó que profesionales del deporte también se unieran, creando la Asociación de Tenistas Profesionales (ATP por sus siglas en inglés).
Golf
St. Andrews, ubicada en la costa Este de Escocia, es la cuna del golf. En dicha localidad se creó el Antiguo y Real Club de Golf, donde se escribieron las normas de éste deporte y así se marcó como se conoce en la actualidad. El Abierto Británico es el torneo más antiguo, remitiendo a 1860 para su primera edición, la cual se llevó a cabo en Prestwick; el ganador no recibió dinero, pero sí el conmemorativo “Cinturón del Desafío”.
Rugby
Se originó hace más de 150 años, cuando William Webb Ellis, quien no estaba de acuerdo con las reglas del futbol, tomó el balón con las manos y corrió con él. Posteriormente se creó la Copa del Mundo de Rugby, evento que ha logrado posicionarse como uno de los más grandes del planeta.
Críquet
El deporte inglés que consiste en dos equipos de once jugadores, que como herramientas de juego cuentan con un bate y una pelota, fue extendido a diversas colonias con el crecimiento del Imperio Británico.
Squash
Nacido como un ejercicio de los reclusos de la Prisión Fleet de Londres, en el que con raquetas lanzaban una pelota en contra de las paredes de las celdas. El squash fue visto y llevado a escuelas inglesas, para que en 1864 fuera declarado deporte y se construyeran las primeras canchas.
Bádminton
En 1873 recibió su nombre en una fiesta del Duque de Beaufort, en la que introdujo a sus amigos como “El Juego de Bádminton”. Cuatro años más tarde se escribieron sus reglas.
Por encima de todos
Estas son algunas disciplinas donde los ingleses ha logrado imponerse
Hamilton, el mito
El piloto de Mercedes igualó a Juan Manuel Fangio en el segundo lugar de los más ganadores, ahora va por los récords de Michael Schumacher.
Hamilton es, desde que domina con su Mercedes, el número uno en varios rubros históricos en la F1.
Consiguió ser en 2017 quien más poles tiene en la historia y en 2018 sigue estirando esa diferencia sobre Schumi. Tiene ya 81 contra las 68 del alemán.
Ya en sus inicios Hamilton había batido algunos registros que lo pintaban como un niño prodigio, con un futuro brillante en la categoría. En su primer año, en 2007, alcanzó el récord de Jaques Villeneuve de más victorias en su temporada debut, con 4, y el que más podios, poles y puntos consiguió en un primer año.
Aunque llegó como líder del campeonato a la última fecha, se le escapó de las manos. Iba a tener revancha más adelante.
Hay récords que Hamilton todavía no puede quitarle a Schumacher. El de los títulos es uno de ellos, aunque con 32 años y un nuevo contrato con Mercedes hasta 2020, se estima que aún tiene potencial para sumar otras dos coronas y así llegar a los siete, una cifra que parecía inalcanzable.
La cantidad de victorias es otro capítulo del que podría adueñarse si mantiene el ritmo de estos años. Schumi tiene 91 y Lewis suma 71. Si se tiene en cuenta que este año ya sumó nueve y que en las cuatro temporadas anteriores acumuló 40 (11 en 2014, 10 en 2015, 10 en 2016 y 9 en 2017), precisaría de no más de dos años similares para igualarlo.
Rodando a la gloria
El ciclismo británico, como a la estela del excelente rendimiento de su país en sus juegos de Londres 2012, está imparable y no para de darse alegrías un año sí y otro también.
Los primeros años de la mano de Chris Froome, dominador del pelotón internacional ganando cuatro Tours seguidos y después encadenando un triplete consecutivo Tour-Vuelta-Giro que no se recordaba desde tiempos de Jaques Anquetil y Eddy Merckx.
Este año, al keniano-inglés le tomó el relevo en el Tour el galés Geraint Thomas, compatriota y compañero en el Sky, el gran constructor de esta época dorada británica de la mano de David Blaisford.
Pero no se ha quedado en el potente Sky el poderío inglés, que tiene en los gemelos Yates, Simon y Adam, dos perlas que ya apuntaron a inicios de década en el Tour del Porvenir de 2013. En el que curiosamente se les impuso el murciano Rubén Fernández, ahora sin demasiada fortuna en el Movistar.
Simon ya amagó lo de esta Vuelta en el Giro que al final se llevó Froome, en el que logró tres victorias y vistió trece días de líder antes de reventar en los últimos días sin que -según él mismo ha repetido a lo largo de la carrera- supiese porqué.
Con este triunfo de uno de los gemelos, su país encadena cinco victorias seguidas en las tres grandes por etapas, algo que hasta ahora solo habían logrado Francia e Italia en tiempos muy lejanos. Y además consigue un hito inédito: ha ganado las tres carreras por etapas en un mismo año.
Algo que a punto estuvo de conseguir España cuando Alberto Contador -siete grandes-, coincidió con Carlos Sastre -un Tour- y Alejandro Valverde -una Vuelta-.
Yates supone junto a su hermano Adam el relevo de Froome y Thomas aún en plenitud pero ya por encima de la treintena que el keniano-inglés cumplió hace tres años y el galés hace dos.
Con todos ellos Gran Bretaña puede continuar a corto plazo con el abrumador dominio de los últimos años, una superioridad sobre el resto que intensifica a cada año y cada carrera que pasa.
El futbol, un paso agigantado
Inglaterra es el campeón Mundial Sub 20. En Corea del Sur, superó por 1-0 a Venezuela el 11 de junio de 2017. Su mejor resultado en esta competencia había sido el tercer puesto alcanzado en 1993 y el triunfo mundial solo fue comparado con la Copa del Mundo de 1966. Inglaterra es el campeón mundial Sub 17. En India, superó por 5-2 a España el 28 de octubre de 2017. Es su primer triunfo en esta especialidad, un hito conseguido luego de estar en desventaja por 0-2. El torneo resulta un éxito popular: es seguido, en los estadios, por 1.347.133 espectadores. En julio de esa misma temporada, Inglaterra se consagra en el campeonato de Europa Sub 19, luego de superar a Portugal por 2-1, en Georgia. Y brilla en el clásico Esperanzas de Toulon de junio de un año más tarde, después de superar a México por 2-1. Inglaterra cree en los proyectos. En el trabajo a largo plazo. Los creadores del fútbol se cayeron al precipicio -sin títulos, sin valores, sin prestigio- y volvieron a las fuentes. La Premier League gobierna Europa con datos. No hay monedas arrojadas al aire: el resultado es la consecuencia. La revolución es el proyecto.
El fútbol inglés va a definir los dos torneos de clubes más importantes de Europa. Liverpool superó por 4-0 a Barcelona en un festín en Anfield que dejó desairado, incluso, a Lionel Messi; Tottenham, dirigido por Mauricio Pochettino, se impuso en un final emotivo a Ajax por 3-2, en Holanda, luego de estar 0-1 en Londres y 0-2 en Amsterdam. La finalísima será el 1° de junio en el Wanda Metropolitano, de Madrid. Inglaterra tiene ahora deseo: un gen competitivo novedoso, un estímulo que le acercan los entrenadores extranjeros, crecidos y educados en culturas diferentes; también, entre sí. Klopp (51 años) y Pochettino (47), de algún modo, se potencian. Y potencian a Pep Guardiola, el entrenador de Manchester City. La finalísima de la Europa League será el 29 de mayo en Bakú. Habrá dos conjuntos de Londres (serán tres, en total, en las dos definiciones). Arsenal superó por 4-2 a Valencia en España y Chelsea venció por penales a Frankfurt en casa. Juego limpio y, ahora, sangre caliente. La receta, dicen, es foránea: un argentino, un alemán, un español, Unay Emery (47) y un italiano, Maurizio Sarri (60). “Los entrenadores extranjeros le dieron un salto de calidad a la Premier, le agregaron otros condimentos. Le dieron más pimienta”, asegura Gianfranco Zola, asistente de Sarri. Meses atrás, pasó José Mourinho.
El 14 de agosto, en Estambul, se resolverá la Supercopa de Europa, entre los ganadores de cada competencia. Lógicamente, será inglés. La Premier League tiene una respuesta. Es el único de las principales cuatro ligas (España, Italia y Francia son las otras), que todavía no tiene un ganador. Barcelona (campeón) le lleva 9 puntos a Atlético de Madrid, Juventus (campeón) le lleva 16 unidades a Napoli y PSG (campeón) le lleva 16 puntos a Lille. Los tres campeones tienen presupuestos mayores a los cuatro equipos que protagonizan la caza de Europa. La Premier se resolverá este domingo. El City tiene 95 puntos (91 goles; en comparación, solo superado por PSG, con 98, en un campeonato desigual), Liverpool, uno menos. La competencia los hace mejores. Público sentado, el fin de las barras bravas que destrozaron la imagen de Inglaterra en el mundo, espectáculos atractivos. El himno de los Reds (“you’ll never walk alone”) es admirado en el mundo: el show como un todo. En la fecha 30 hubo un promedio de gol de 3,3 por partido. Los milagros de Anfield y Amsterdam llevan el secreto de los nuevos tiempos en el fútbol británico.
David, entre Goliats
Solo un hombre ha sido capaz de desbancar a Federer, Djokovic y Nadal del número uno. Solo un hombre rompió la sequía de 76 años sin un título de Grand Slam británico. Solo un tenista ha ganado dos oros olímpicos. Solo un hombre, Andy Murray, el sucesor de Fred Perry.
Murray cayó en sus cuatro primeras finales de Grand Slam, desde 2008 hasta 2012, quedándose a una del récord de Fred Stolle, quien entregó cinco.
La racha se rompió en el US Open de 2012, meses después de vencer a Roger Federer en el All England Club en los Juegos Olímpicos de Londres, donde también se hizo con la plata en la modalidad de dobles mixto.
Murray ya sabía lo que era perder una final de Wimbledon y necesitó de un año más, 2013, para vengar la figura de Perry y alzarse con la copa dorada 77 años después de que lo hiciera el ya fallecido Perry.
Otras tres derrotas en finales precedieron a su mejor año en la elite. Un 2016 en el que sumó nueve títulos, entre ellos su segundo Wimbledon y la Copa de Maestros, además del oro olímpico en Río de Janeiro. El último día del calendario ATP, firmó el número uno del mundo. Tocó el techo y cayó de la manera más injusta para un deportista. Lastrado por las malditas lesiones.
45 títulos, tres Grand Slam, 14 Masters 1.000, tres medallas olímpicas, una Copa Davis y 41 semanas como número uno del mundo.
Honor a la invención
El piloto de Mercedes igualó a Juan Manuel Fangio en el segundo lugar de los más ganadores, ahora va por los récords de Michael Schumacher.
Hamilton es, desde que domina con su Mercedes, el número uno en varios rubros históricos en la F1.
Consiguió ser en 2017 quien más poles tiene en la historia y en 2018 sigue estirando esa diferencia sobre Schumi. Tiene ya 81 contra las 68 del alemán.
Ya en sus inicios Hamilton había batido algunos registros que lo pintaban como un niño prodigio, con un futuro brillante en la categoría. En su primer año, en 2007, alcanzó el récord de Jaques Villeneuve de más victorias en su temporada debut, con 4, y el que más podios, poles y puntos consiguió en un primer año.
Aunque llegó como líder del campeonato a la última fecha, se le escapó de las manos. Iba a tener revancha más adelante.
Hay récords que Hamilton todavía no puede quitarle a Schumacher. El de los títulos es uno de ellos, aunque con 32 años y un nuevo contrato con Mercedes hasta 2020, se estima que aún tiene potencial para sumar otras dos coronas y así llegar a los siete, una cifra que parecía inalcanzable.
La cantidad de victorias es otro capítulo del que podría adueñarse si mantiene el ritmo de estos años. Schumi tiene 91 y Lewis suma 71. Si se tiene en cuenta que este año ya sumó nueve y que en las cuatro temporadas anteriores acumuló 40 (11 en 2014, 10 en 2015, 10 en 2016 y 9 en 2017), precisaría de no más de dos años similares para igualarlo.
