La UE y Japón aprovechan el G7 para dar un impulso a su acuerdo comercial

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La UE y Japón aprovechan el G7 para dar un impulso a su acuerdo comercial

Foto: EFE
La discusión se centró en la necesidad de avanzar pronto para concluir el tratado entre la Unión Europea (UE) y el país asiático

Italia.- Los presidentes del Consejo Europeo, Donald Tusk, y de la Comisión Europea (CE), Jean-Claude Juncker, se reunieron en los márgenes de la cumbre del G7 con el primer ministro japonés, Shinzo Abe, para tratar de dar un empujón a las negociaciones del acuerdo de libre comercio que negocian.

La discusión, de unos treinta minutos, se centró en la necesidad de avanzar pronto para concluir el tratado entre la Unión Europea (UE) y el país asiático, dijeron a Efe fuentes europeas presentes en el encuentro.

Las partes pusieron el acento en las negociaciones sobre agricultura, aranceles al comercio de bienes y licitaciones públicas, los puntos que suponen el principal escollo para cerrar el acuerdo y cuya discusión pretenden acelerar.

Asimismo, el primer ministro nipón y los líderes comunitarios debatieron sobre la fecha más apropiada para celebrar la próxima cumbre UE-Japón con el objetivo de que este encuentro de alto nivel que los socios celebran anualmente en Tokio o Bruselas pueda realizarse cuanto antes.

La reunión ha permitido realizar "buenos progresos" en las negociaciones, según las citadas fuentes.

La UE y Japón iniciaron en 2013 las negociaciones para concluir un acuerdo de libre comercio que lleva bloqueado desde el pasado diciembre pero ha cobrado especial relevancia tras la deriva proteccionista de Estados Unidos.

A la espera de conocer si Washington se mostrará mañana de acuerdo con sus socios del G7 en la tradicional condena al proteccionismo de este foro, el acuerdo es visto por la UE y Japón como un modo de enfrentar los reveses que pueda sufrir el libre comercio global.

Para Japón es crucial dado que el Tratado Transpacífico "ha perdido relevancia, según admitió el propio Abe, con la retirada de Estados Unidos, mientras que para la UE sería un modo de paliar la pérdida del mercado británico tras el "brexit".