La Secretaría de Salud (SS) debe entregar toda la información relacionada con el diagnóstico, análisis o estudio sobre el problema de arsénico en el agua de la Comarca Lagunera, conformada por municipios de Coahuila y Durango.

El Instituto Nacional de Transparencia (INAI) ordenó a la dependencia federal entregar la información que un ciudadano había solicitado mediante una solicitud de información. Al responder la solicitud, la SS se declaró incompetente y sostuvo que era la Comisión Federal para la Protección Contra Riesgos Sanitarios (Cofepris) quien debía responder.

Sin embargo, la problemática descrita se relaciona con enfermedades, por lo que la secretaría debe de ser competente y entregar la información.

Los comisionados del INAI detallaron que la Organización Mundial de Salud ha enfatizado que el consumo de arsénico provoca serios problemas en la condición física de las personas, particularmente la enfermedad denominada arsenicismo, caracterizada por lesiones cutáneas que favorecen el desarrollo de tumores y diversos tipos de cáncer.

“Para la instancia internacional el problema no es menor, por lo que ha catalogado al arsénico como una de las 10 sustancias químicas más preocupantes para la salud pública y ha recomendado con alta prioridad el desarrollo de análisis sistémicos de fuentes de agua de consumo”, afirmó la comisionada Areli Cano.

Al analizar el caso, Cano corroboró que actualmente la Cofepris tiene entre sus atribuciones vigilar los efectos nocivos de los factores ambientales en la salud humana, por lo que es competente para conocer la solicitud; sin embargo, se advirtió que esta instancia fue creada en 2001 y es la SS quien tiene en sus archivos históricos la información del problema que se ha presentado desde hace ya muchos años.

Ya existe antídoto para eliminar arsénico en la Laguna
 
El 4 de septiembre Vanguardia publicó que José Refugio Parga Torres, quien se ha encargado del estudio de arsénico en la Laguna, encontró un antídoto para eliminar esta sustancia del agua mediante la tecnología de electrocoagulación.

El arsénico es capaz de mutilar piernas, manos, brazos o cualquier parte del cuerpo. Según estudios realizados por este investigador el 30 por ciento de la población de la Comarca Lagunera tiene manchas en la piel provocadas por la sustancia.

El proyecto que este investigador hizo fue respaldado por el Gobierno de Estados Unidos. Con él demostró que la tecnología de la electrocoagulación puede eliminar las altas concentraciones del metal concentrado en las norias del Simas en Torreón y otras demarcaciones circunvecinas. La investigación, elaborada en colaboración con la National Science Foundation (Fundación Nacional para la Ciencia) y el Conacyt, también reveló que esa técnica era la opción más efectiva y económica.

Para el desarrollo de esa tecnología utilizó energía eólica o solar, electrodos de hierro y de  aluminio, éstos últimos podrían ser de chatarra como latas vacías de refresco o cerveza.

En una laguna contaminada con arsénico y otro metal pesado se coloca un sistema en el que se introducen los electrodos positivo y negativo de forma bipolar. Se le transmite corriente al electrodo de hierro al positivo y éste empieza a generar material magnético que es elegido para atraer el arsénico, plomo y cadmio.

Pese a que ya existe esta técnica, que resulta más económica, el gobierno prefirió instalar, entre 2012 y 2015 cerca de 62 mil 396 dispositivos con un costo total de 106.2 millones de pesos en los municipios duranguenses de Gómez Palacio, Lerdo, Tlahualilo y Mapimí, principalmente. En Coahuila, el Instituto Mexicano de la Tecnología del Agua (IMTA) recomendó un sistema de filtración directa en las norias, por lo que en Torreón se instalaron varios filtros en los pozos con más altos niveles de arsénico.