Hipnosis, cada vez gana más seguidores en Saltillo
Con más de nueve años de experiencia, Eliud Iván Vigil, psicólogo especializado en hipnosis clínica, señala que cada vez son más los pacientes que prefieren tratamientos alternativos para enfrentar diferentes situaciones, enfermedades, patologías, conductas y hábitos, así como para complementar las técnicas de aprendizaje. Uno de ellos es la hipnosis clínica.
El experto señala que su aplicación puede tener injerencia en ramas como la medicina, educación y la psicología.
La hipnosis clínica es un tipo de psicoterapia que utiliza métodos guiados de relajación y concientización intensa, centrando la atención del paciente para conseguir un estado elevado de conciencia que permite explorar pensamientos dolorosos, sentimientos y recuerdos que podrían haberse ocultado de la mente consciente.
“Esta es una habilidad que tiene el cerebro, es una capacidad que todos tenemos para vivir experiencias que ocurren en dos niveles de conciencia, en un nivel yo como paciente escucho y analizo críticamente lo que el terapeuta me está comentando y en un segundo nivel de conciencia, de manera inconsciente trabajamos para poder modificar respuestas de conducta, de emociones y pensamientos para que podamos resolver nuestras dificultades de manera más responsable”, dijo.
Desmintió que esta técnica se trate de dormir a los pacientes o inducirlos a actos fuera de su voluntad como se muestra en ocasiones en la televisión, por el contrario, aseguró que se trata de llevar al paciente a un estado de atención y conciencia de segundo nivel.
Manifestó que la hipnosis por sí sola no brinda resultados inmediatos, sino que el 80 por ciento de los cambios dependen del paciente y el otro 20 por ciento de la técnica que el experto aplique, haciendo todo esto en un marco de respeto a los derechos humanos.
Además de su aplicación en la psicología con pensamientos asociados al dolor, tristeza o ansiedad, hoy en día algunas personas optan por utilizar para la prevención del suicidio en sesiones individuales.
TERAPIA POR UNA VIDA
El especialista destacó que al menos un 40 por ciento de los pacientes que acuden en busca de terapia tienen o tuvieron pensamientos para terminar con su vida, por lo que en la ciudad comienza a utilizarse la hipnosis como alternativa para la prevención de suicidio a través de un “contrato de vida”, así como el trabajo conjunto de psiquiatras expertos en la materia.
Cada una de las sesiones de hipnosis terapéutica o clínica puede durar entre una hora o una hora y media aproximadamente, en la que la mitad del tiempo se dedica a saber sobre el estado del paciente, mientras que el resto de la sesión se utilizará para la hipnosis.
En este momento el paciente pasará por cuatro diferentes fases: inducción, profundización, sugestión terapéutica y des hipnotización, además el paciente podría llevarse a su hogar una serie de tareas terapéuticas como la escucha de audios grabados en la consulta con el establecimiento de objetivos para corregir conductas o hábitos.
VALIDEZ ACADÉMICA DE LA HIPNOTERAPIA
Mucho se cuestiona la validez que la ciencia otorga a este método de psicoterapia, Iván Vigil asegura que en la actualidad el Instituto Milton H. Erickson se especializa en hipnosis y cuenta con el respaldo académico de la Universidad Autónoma de México.
Vigil, quien además es el coordinador del Centro Superior de Hipnosis Clínica de Coahuila, asegura que el debate sobre la veracidad y efectividad de la hipnosis se ha desvirtuado gracias a los medios masivos de comunicación, que muestran el método como un espectáculo para orillar a las personas a actuar sin tener control de su voluntad.
“Esta es la institución que está más fuerte ahorita para la promoción académica para aprender hipnosis, porque el Centro Superior de Hipnosis Clínica y el Instituto Milton cuentan con el respaldo de la Universidad Autónoma de México y quienes están practicándola la mayoría somos egresados de ahí”, dijo.
Adelantó que en febrero de 2020 se impartirá en Saltillo un curso de nivel posgrado para profesionales de la medicina, educación y psicología que deseen sumarse al uso de este método para mejorar la reacción de los pacientes a tratamientos clínicos, aprendizaje o psicoterapias.
PASO A PASO
Cada una de las sesiones de hipnosis terapéutica o clínica puede durar entre una hora o una hora y media aproximadamente.
En la segunda parte de la sesión se usa la hipnosis.
El paciente pasará por cuatro diferentes fases: Inducción, profundización, sugestión terapéutica y deshipnotización.
DA SALTILLENSE TESTIMONIO DE LA EFECTIVIDAD DE LA HIPNOSIS
Para Jesús Sánchez dormir ya no era una actividad básica, dormir era un lujo que sus niveles de ansiedad no le permitían. Ya había probado desde remedios caseros, hasta tratamientos psiquiátricos que poco le daban calma.
Pero desde hace seis años no ha vuelto tomar ni una de las pastillas que su psiquiatra le recomendó para la ansiedad. No recuerda cómo fue que sucedió, pero las sesiones con su psicólogo y el método de la hipnosis le devolvieron las horas de sueño y lo convirtieron en una persona segura de sí misma.
“Yo tenía en esa época trastornos de ansiedad y ataques de pánico, ya feos. Tenía problemas para dormir, tenía miedo, era algo muy feo. Ya era insoportable, por eso decidí buscar ayuda y fui con el psicólogo.
“La psicóloga que me atendió en Torreón me canalizó con un psiquiatra para que me diera medicamentos que ella evidentemente no me podía recetar y él —el psiquiatra— me dio medicamento y cuando avanzó un poco me dijeron que parte de la terapia podría ser la hipnosis clínica”, dice.
Así es como recuerda Jesús que conoció la hipnosis clínica para controlar su ansiedad.
Detalla que el tratamiento es poco parecido a lo que se ve en las películas y en la televisión, en donde se pierde por completo la voluntad, pero tampoco recuerda más que estar en un estado de relajación profunda. También recuerda que fueron poco más de tres sesiones las que le bastaron para controlar sus episodios de pánico.
“La idea era obtener cierta información para saber dónde es que pudo surgir la ansiedad y el pánico. No recuerdo mucho de la hipnosis, pero llegué luego de una sesión psicológica con el doctor y recuerdo que tenía que pronunciar un mantra o una palabra clave para poder relajarme en la mente una y otra vez acompañado de respiración pausada.
“Era jugar mucho con la respiración. Respiraba, decía el mantra y soltaba el aire, respiraba, decía el mantra y soltaba el aire y así me fui relajando hasta llegar casi a un nivel de sueño”, relata.
Una vez en este estado Jesús solamente recuerda una voz suave que lo conducía a situaciones de las que solo sabe que le producían tensión, pues entre sus pocos recuerdos su respiración se agitaba de nueva cuenta y el miedo lo invadía. “Quizá me fue llevando a algunas cuestiones de la infancia, pero no recuerdo si fue así”, comparte para VANGUARDIA.
Posterior a estas sesiones asegura que su vida dio un giro inesperado, ahora se considera una persona que asume su rol en la vida sin “tomarse a pecho” los problemas que día con día deba enfrentar, o las situaciones que pudieran llevarlo al borde de los nervios.
“Sí cambió mucho mi vida, ya no me tomo las cosas tan a pecho, ya no hay un ataque de pánico como tal, ya no existen. Puedo trabajar mucho más bajo presión y no me dejo afectar tan fácil por las situaciones o por las cosas que no están en mis manos”, asegura.
Jesús, como la mayoría de los pacientes que acuden al consistorial del psicólogo Iván Vigil en busca de la hipnosis, cumple con el perfil promedio: hombre o mujer adulto menor de 40 años que busca este método para manejar el estrés laboral o cuadros de ansiedad por los cargos y responsabilidades que cumplen, es decir, ejecutivos con mandos medios.