La fiesta patronal más visitada de Saltillo dio inicio este sábado con la espera de que al final del festejo hayan acudido más de 100 mil feligreses. Bajo el eje de la “fraternidad”, la Diócesis de Saltillo dio inicio con los festejos del Santo Cristo; una de las fiestas más emblemáticos para la ciudad a la cual esperan al menos 10 mil asistentes por cada día, antes del cierre de calles que culminará con la fiesta del 6 de agosto.

La primera actividad, fue la del descenso del Santo Cristo de la Capilla, quien cada año es trasladado al altar de la Catedral de Saltillo.

Este novenario culminará con el tema de la Justicia como generadora de paz. Durante la homilía que encabezó el obispo de Saltillo, Raúl Vera López, advirtió que la “Iglesia que Dios quiere, es la que incluye a los despreciados; a los migrantes, a los jóvenes, los pobres”. “Dios nos ama a todos por igual”, manifestó.

Los temas del novenario serán los siguientes: La mesa del encuentro; El mundo nos vuelve extraños; Feliz el que vive de cara a su hermano; Amar es tocar la carne del hermano; Los hermanos se reconocen por sus heridas; Tenían un solo corazón y una sola alma; La trama comunitaria se teje con pequeños detalles; La especialidad de la casa: el perdón y la corrección fraterna, y Del amor fraterno a la edificación de la justicia y la paz.

“En este camino que estamos recorriendo los bautizados, sacerdotes, religiosas y laicos, en esta Diócesis hemos pasado una etapa centrada en el valor de la dignidad humana, ahora estamos trabajando el valor de la fraternidad y el novenario del Santo Cristo es una oportunidad. Cristo es el modelo de la fraternidad, Él es el que nos enseña cómo ser hermanos y es el fundador que nos lleva a ser casa y escuela de la fraternidad”, comentó la Diócesis de Saltillo.

Raúl Vera oficiará la primera misa del novenario cada día, a las 05:30 horas.