A partir de la declaración de emergencia sanitaria por COVID-19 y de que los hospitales se han vuelto un punto rojo para la sociedad, los bancos de sangre de Christus Muguerza y Clínica La Concepción en Saltillo, han sufrido en las últimas semanas una baja afluencia de donadores de sangre y temen un posible desabasto para los próximos días. 

De acuerdo con empleados de ambos hospitales, la ausencia de voluntariado se ha venido presentando a lo largo de la última semana, toda vez que la donación de sangre en hospitales privados, en comparación con las instituciones públicas, se recibe como labor altruista y de manera voluntaria, y no se exige a los pacientes llevar donadores para brindarles la atención. 

Como ejemplo, se mencionó que para una sola operación de corazón se necesitan seis tomos de sangre, y en la última semana solo se captaron entre 4 ó 5 unidades en promedio en los dos hospitales privados.

“En un mes serán mínimo unas 40 ó 45 unidades las que se utilizan. Varía, pero es un aproximado”, expresó.

Estas unidades, además tienen una duración de 30 a 45 días de refrigeración; sin embargo, de acuerdo con personal de ambos hospitales, ninguno de los bancos cuenta con demasiadas unidades de reserva.