Los padres del menor fallecido a causa de una broncoaspiración, Landon Yahir, perdieron la patria potestad de sus cuatro menores hijos, luego de que se consiguieran los testimonios necesarios que señalan el maltrato severo del que eran victima los niños.

Uno de los testigos fue amenazado de muerte por Olga y Jacinto, quienes fueron denunciados por las amedrantaciones.

Fue el sábado pasado alrededor de las 18:00 horas que la dependencia estatal que procura los derechos de los niños y la familia, notificó a Óscar Moreno Sánchez (quien pretendía quedarse con los menores), padre de Olga, madrastra de Landon, que le había sido negada la guardia y custodia de sus cuatro nietos.

Fuentes extraoficiales señalan que la negativa de la guardia y custodia se derivó a raíz de los testimonios proporcionados por vecinos, tanto de Saltillo como de Santa Catarina, que ofrecieron las pruebas necesarias para comprobar que Landon no era el único maltratado.

Luego de la notificación, el profesor (Moreno Sánchez), quien desempeña labores en la secundaria Técnica Número 4, acudió a la calle Meter, en el fraccionamiento Las Torres, donde amenazó de muerte a las hijas de uno de los testigos. Con él vivían los padres de los menores.

A raíz del incidente, personal de la Procuraduría para los Niños, las Niñas y la Familia, acudió al domicilio del agredido y tomó conocimiento de lo sucedido, para presentar una demanda formal, y dejar constancia de las amenazas.

Mientras tanto, los cuatro menores, de nueve, cuatro y tres años de edad, además de una más de tan solo cuatro meses, continúan bajo resguardo de la autoridad estatal, quien sigue en busca de una familia de apoyo.

Imperdonable

Olga y Jacinto son padres del niño Landon Yahuir, quien murió recientemente por broncoaspiración.
Los padres fueron acusados de torturar al menor, a quien mantenían encerrado en un cuarto.
El pequeño presentaba alarmante desnutrición.
Según testigos, sus padres le daban de comer su propio excremento al menor.
También, aseguran, le daban a beber su orina.
Los otros niños (cuatro), también eran golpeados por la pareja.