El toque medicinal

Para las reumas, para el cáncer, para las dolencias, para el insomnio, para la ansiedad, para el dolor, para la anorexia, para la hiperactividad, para el nerviosismo... motivos curativos sobran entre los saltillenses que la usan de manera habitual, pero ¿qué dicen los expertos?
Estaría muy bien que se legalizara la mariguana y que se tuvieran estudios científicos que avalaran las cualidades de este tipo de plantas, no solamente la mariguana, el peyote. Que se patrocinaran investigaciones para aprovecharla. Dicen que somos país productor, pues a aprovecharla y disminuir el uso de farmacéuticos. Es una lástima que en México no se aproveche lo que se tiene natural”.
Consumidor para uso medicinal

Para que la mariguana sea más efectiva debe mezclarse con alcohol balsámico y peyote o hueso de aguacate criollo, y dejar que se fermente durante un año, hasta que suelte todas sus proteínas e ingredientes, y el alcohol se ponga de un colorcito café oscuro, como si estuviera oxidado.

El modo de uso es así:

Se impregnan las manos con la mezcla, se impregnan, se impregnan y luego frotas, frotas así, por las noches, donde tengas el dolor, ya sea en las piernas, las rodillas, en los codos, en los hombros, en la espalda, en los dedos de pies, de manos…

Y listo…

Al otro día amaneces fresco, como nuevo, más flexible y, lo que es mejor, descansado.

Está diciendo al tiempo que agita con gusto una botella de tequila donde bulle enloquecida la mezcla café oscuro, como si quisiera salirse por el pico de la damajuana. 

Esta receta no se la dieron en un consultorio del Seguro Social,  tampoco en una tienda naturista. Circula a ojos vistas por las calles de Saltillo y ha pasado de generación en generación.

No sabe quién la inventó ni cuándo.

Los que la recomiendan sólo dicen que viene de sus abuelos, que de sus abuelos, dicen, que sus tías, que su mamá, que su abuelita.

Y mientas los ciudadanos y la Corte andan empleitados por la legalización o no de la mariguana con fines curativos, este remedio de la medicina popular tradicional prevalece y se extiende.

“Estaba viendo un reporte de que en México hay alrededor de cinco millones de personas que consumen mariguana con fines  recreativos. Yo creo que ha de haber más de cinco millones que la utilizan de forma medicinal, como un servidor”.

Dice una mañana fría, de esas frías mañanas en que a él le vienen los dolores en las rodillas, por el frío y entonces no puede dormir bien, le cuesta moverse y caminar.

Lo de sus rodillas, dice, es hereditario.

Su padre, que era obrero, padecía también esas dolencias articulares, reumáticas, y se untaba el alcohol mezclado con mariguana en greña, en greña, como dicen los cholos, para ver si se le calmaban los dolores y se le calmaban.

Dice y vuelve a agitar la botella con la mezcla marrón, un marrón espeso, reconcentrado, por cierto.

Usa este remedio, cuenta, desde hace ocho años.

Unos amigos del estado de México le pasaron la receta de la mariguana mezclada con alcohol balsámico y hueso de aguacate criollo y él se la aplicó.  

Desde entonces, asegura, sus dolencias han disminuido.

“Con este ungüento puedo flexionar muy bien las piernas y los dolores son mínimos”, dice y yo me imagino a uno de esos actores - anunciadores de canales de marketing, pero no,  él no es anunciador, es un ciudadano común, profesionista, con grado de doctor, 50 años. No diré su nombre. 

Por su trabajo él tiene que estar mucho tiempo hincado en la tierra, subiendo y bajando montañas, escaleras en su oficina, lo que ha agravado de sobremanera sus dolores de rodillas. 

Pero cuando le viene fuerte el dolor, posterior a impregnarse la mezcla de mariguana con alcohol balsámico y hueso de aguacate criollo, se pone también ungüento de mineral ice que le ayuda a disminuir la dolencia y le da mayor flexibilidad.

“La dejo que seque y una vez que seca, que seca muy rápido porque es alcohol balsámico, me pongo el ungüento”.

Tiempo atrás sus médicos lo estuvieron bombardeando con pastillas de Dolo Neurobion y Celebrex, que si bien le quitaban las malestares, eran demasiado para su estómago.

“Ha avanzado la ciencia en cuanto a medicina, pero sabemos que el estar consumiendo fármacos también hace mal. Por ejemplo, el Dolo Neurobion, que es el más fuerte, te ayuda a disminuir el dolor y además de que trae Complejo B, trae Diclofenaco y el problema es el Diclofenaco que se acumula en el hígado y puede ocasionar cirrosis”.

A su inventario clínico había sumado ya tres operaciones de rodilla.

No mejoraba.

La mariguana, dice, le ayudó a tal grado que sus médicos le bajaron a la mitad las dosis de pastillas, eso le generó un ahorro en la compra de medicamentos y no volvió a pasar por un quirófano.

“Esto ayudaría mucho a disminuir la compra de medicinas y hay mayores beneficios colaterales porque no tiene uno problemas que si estuviera consumiendo tanto farmacéutico”.

Esta mezcla, dice, no la venden en ninguna parte, es totalmente casera, la prepara él.

Lo difícil, y aunque algunos, aseguran que Saltillo sea el “reino de la mota”, está en conseguir la yerba y por eso se ha encarecido, al menos para su bolsillo.

“Me sale cara porque la persona que me la consigue, y que la usa con fines recreativos, se queda con parte de ella y me la da a más alto precio, entonces eso me complica la situación”.

Pero otra tarde que voy a buscarlo a su casa para pedirle que me regale un poco de alcohol balsámico revuelto con mariguana en greña y hueso de aguacate criollo, para la mamá de una amiga que sufre dolores articulares, me saca un garrafón de cuatro litros que calculo le aguantará varios años.

Dice que seguido comparte con amistades y parientes chorritos de esta mezcla, que guarda celosamente en la cocina de su casa.

“Toda mi familia la usa”, dice.  

Durante el reporteo supe de familias enteras que en Saltillo utilizan la mariguana mezclada con alcohol balsámico para las reumas.

Se negaron a ser entrevistados para el Semanario.

“Estaría muy bien que se legalizara la mariguana y que se tuvieran estudios científicos que avalaran las cualidades de este tipo de plantas, no solamente la mariguana, el peyote. 

“Que se patrocinaran investigaciones para aprovecharla.  Dicen que somos país productor, pues a aprovecharla y disminuir el uso de farmacéuticos. Es una lástima que en México no se aproveche lo que se tiene natural”.

Pero a Francisco Israel Guerrero Díaz, reumatólogo adscrito al Hospital Universitario de Saltillo, le parece “realmente complicado” el que por este “pequeño” aspecto de analgesia, de que aminora el dolor, sea justificado el uso de la mariguana.

Se sabe que tiene ciertos efectos analgésicos y por eso se utiliza en  combinación con el alcohol y algunas otras sustancias.

Sin embargo, existen, aclara, medicamentos que se pueden emplear como analgésicos, con la misma potencia.

“La otra es analizar el origen de sus dolores, porque si tiene una forma de artritis, a pesar de que se aplique eso no está corrigiendo la enfermedad y van a seguir las dolencias.

“El hecho de utilizar mariguana no me ataca la enfermedad, eso nada más me va a calmar el dolor y aquí lo que aplicamos es, dependiendo de la enfermedad, un tratamiento específico para que no tenga dolores”.

Guerrero Díaz revela que ha conocido incluso casos de pacientes que fuman mariguana para calmar sus dolencias físicas.

En tales casos deben considerarse, primero, las implicaciones de esta forma de consumo.

“Quizá en el aspecto local, combinada con alcohol no tiene tantos efectos secundarios, pero sabemos que el fumar mariguana no es tan sencillo, tiene efectos a nivel de cerebro, es una droga”, dice Guerrero Díaz, una mañana que lo entrevisto en su oficina del H.U.

¿Calmante de ansiedad? Hay quienes la prefieren antes que tomarse ansiolíticos fuertes como el Rivotril.

Calmante de ansiedad

Este es un molino.

Y entonces, primero, se muele.  

Para eso tiene que estar bien seca.

Antes hay que quitarle las semillas, en caso que tenga semillas.

Y ahora sí, se rellena el molino, se cierra, se le da un poco de vuelta, así.

Una vez que está bien molida se mete en la roladora con el papel, para armar el cigarro.

Claro que puede hacerse a mano, ahora hay hasta pipas especiales y papel de sabores.

Se enrolla el papel, le pones saliva, lo cierras y listo…

Tenemos el cigarro.

Está diciendo y advierte que él la consume solamente con fines terapéuticos, curativos, medicinales.

No es adicto.

Cuando niño había sido diagnosticado con déficit de atención, hiperactividad y ansiedad, y a pesar de sus buenas calificaciones, en la escuela lo tuvieron siempre por un chico  problema.

No podía mantenerse quieto en un solo sitio y por las noches se le iba el sueño.  

“Era un motor, siempre mi cerebro pensado, penando, pensando en la noche, vas, te paras, te mueves”.

Hasta que llegó el momento en que no dormía nada y empezó a ir a terapias y a consultas con especialistas que nada más lo atiborraron de pastillas.

Ya adolescente sus doctores lo bombardearon con Rivotril, Ritalin y Lexapro: Rivotril para dormir, Ritalin para despertar, Lexapro para el día.  

“Pero aparte que son caras, me tumbaban y a veces no había en las farmacias”.

Pronto se hizo dependiente del Rivotril, que si bien le ayudaba a conciliar el sueño durante la noche, lo sumía en un molesto letargo el resto de la mañana y de la tarde.

“Me sentía como un zombie, me hicieron un zombie”, acusa.

A los 25 años se inició en el uso recreativo de la mariguana.

Con el tiempo descubrió en esta planta una medicina contra el insomnio y la ansiedad.

Dormía siete horas seguidas y despertaba tranquilo, relajado, descansado.

Se siente lúcido, ágil, activo, fresco.

“Dormía mucho mejor, más tranquilo y amanecía perfectamente bien, sin cruda, como a veces les da a los que fuman o a los que toman. Todo el día andaba muy bien y vi que los beneficios eran mayores a los de los de los químicos y sin efectos secundarios.

“No estoy diciendo que es algo bueno, pero al menos en mi caso personal ha cumplido una función. No la puedo defender, quiero ser lo más honesto posible”.

Después, durante sus clases de maestría, notó que sus niveles de concentración y retentiva aumentaban, que se le abrían los sentidos, el pensamiento y la creatividad.

“Batallé muchísimo más que mis compañeros para recibirme de mi maestría, porque no podía estar sentado para estudiar, Si hubiera sabido de esto desde que estudiaba mi carrera, a lo mejor hubiera sido más fácil para mí estudiar”.

Olvidé decir que él es profesionista con grado de maestría, que tiene 45 años y que da clases de música a un grupo de niños, por eso prefiere se respete su identidad.  

Desde entonces por las noches y  antes de irse acostar, él se receta un medio cigarrillo de mariguana y nada más.

Dice que es una forma de automedicación un tanto empírica.

No fuma tabaco ni consume otra droga ilegal, bebe una o dos cervezas ocasionalmente, hace ejercicio, se alienta en forma saludable y en los último check up clínicos que se mandó hacer salió perfecto.

“Me he hecho exámenes médicos y no tengo nada ni problema en los pulmones ni algo que digas pérdida de memoria o ansiedad o trastornos de personalidad.

“No tengo esos estados de alucine ni de alteración, como los que provoca el alcohol y otras sustancias. No me siento Superman ni me tiro por una ventana”.

Sus pastillas de Rivotril, Ritalin y Lexapro, quedaron arrumbadas en un cajón de la cómoda de su recámara. 

Dice inclusive que algunos psiquiatras, fuera de consulta, le han recomendado el uso de mariguana, fumada, con fines curativos.

“Platicando con un doctor, que es egresado del Tec de Monterrey y que hizo su especialidad en Madrid sobre adicciones, me dijo que la mariguana es algo que realmente sirve y que si fuera legal él podría ayudar a muchos de sus pacientes”.

Pero no es fácil conseguirla y él tiene que andarse con cuidado a la hora de transportarla.

Tiene miedo.

“Esa es la desventaja que, de repente, no tienes fácil acceso a ella y me viene otra vez en la noche todo este problema de no poder dormir”. 

Mientras reporteaba este tema me topé con otras historias de pacientes que fuman mariguana para contrarrestar sus niveles de hiperactividad, dolencias físicas, nerviosismo y hasta anorexia.

Algunos de ellos por recomendación de sus psicólogos o psiquiatras.

Ninguno quiso acceder a la entrevista.  

Mario Alberto José de los Santos, el director del Centro Estatal de Salud Mental, declara otra mañana en su despacho, que el problema viene cuando se cae en un abuso, dependencia o adicción a la mariguana, una droga que obviamente tiene efectos colaterales a corto y largo plazo.

“Puede causar un síndrome amotivacional y en gente joven, diríamos en los adolescentes, afecta la memoria, el aprendizaje e incrementa el factor de riesgo, en forma significativa, a padecer esquizofrenia y otras enfermedades mentales de las cuales puede haber cierta predisposición.

“Creo que muchas personas que tienen padecimientos de ansiedad pueden caer en el uso habitual de la mariguana, como una forma de automedicación muy empírica que a lo mejor, en su experiencia, les puede estar funcionando. Eso es muy variable y muy complejo”.

La mariguana en forma fumada, advierte José los Santos, tiene además implicaciones a nivel de vías respiratorias, como: mayor riesgo a parecer cáncer laríngeo o pulmonar.

Sin embargo, señala:

“Yo creo que tenemos que afinar los detalles, la forma de administración para buscar los efectos de beneficio de la sustancia y sacarle más ventaja a esta planta que es natural, que crece en todas partes del mundo, que es muy fácil su cultivo y que sí creo que tiene buenas indicaciones en medicina que tendríamos que aprovechar”.

Desde hace más de 30 años se descubrió, por ejemplo, que el uso de la mariguana inhalada o ingerida reduce significativamente la presión intraocular, por lo que es útil en el tratamiento del glaucoma, enfermedad que puede producir ceguera.

En pacientes con cáncer sometidos a quimioterapia y que frecuentemente sufren de náuseas y vómitos, se encontró que la ingestión de dosis de THC, la sustancia activa de la cannabis, puede disminuir los síntomas en el 50 por ciento de los casos, además de que mejora el apetito y el estado de ánimo, lo que retrasa la pérdida de peso en los enfermos de cáncer. 

Del mismo modo se han reportado efectos benéficos en pacientes con asma, debido a que la mariguana provoca broncodilatación.  

El peyote mezclado con mariguana y alcohol es el remedio común para muchos atletas de futbol americano y beisbolistas de Saltillo.

Pomada milagrosa

Caminando por algunos de los mercados ambulantes más grandes y populares de la ciudad, me encontré con algunos puestos en los que a todas luces se expendían productos, como tarros de geles medicinales, elaborados a base de peyote, “reforzado”, con mariguana y árnica.

Este Gel de Peyote, que es frio y de un color shedrón, está indicado, según la etiqueta en la que se aprecia el símbolo que distingue a la cannabis, para dolores de rodilla, ciáticos, lumbar, esguinces, calambres, várices, tos, anginas, ácido úrico, deformidad o dislocación de huesos, “nervios hechos bola”, desgaste de cartílago, ardor, frialdad, hinchazón, torceduras y golpes internos.

En su fórmula, además de la mariguana, figuran compuestos como la glucosamina, condoctrina, doclofenaco, reconstructor y lidocaína, entre otros.   

En la parte baja del rótulo de este gel se destaca la leyenda “este producto no es un medicamento el consumo de este producto es responsabilidad de quien lo recomienda y de quien lo usa”.

No viene el nombre o patente de algún laboratorio.

En algunas yerberías del centro es posible encontrar también frascos de otro gel blanco de “peyote con cannabis”, que, de acuerdo con su  etiqueta, sirve para dolores de huesos, espalda, torceduras, músculos, rodillas, hombros, cuello, calambres, masajes, “etcétera”.

En la parte de debajo de su presentación se ostenta el nombre de un  laboratorio Valns S.A. y la marca “Hecho en México”. 

Este producto no se encuentre a la vista de la gente, dijo la dependienta de una tienda de herbolaria, por razones de seguridad.

“Ya ve cómo están las cosas”, soltó la mujer   

Y cuando le pregunté si ella lo preparaba, respondió que no, que se lo trae “un proveedor”.

Se frota en el área del dolor y con un masaje promete deshacer bolas y relajar los músculos, para muchos este es un producto que está en el botiquín de la casa.

Fermentada

En el transcurso del reporteo di también con algunas historias de personas que han utilizado por años la mariguana, fermentada en alcohol, para combatir la inflamación, cansancio, dolores y problemas de circulación en las piernas, pero que, ante la falta de disponibilidad de la yerba, han tenido que recurrir al consumo de medicamentos como el  Paracetamol, Diclofenaco y Complejo B, circunstancia que, aseguran, les ha acarreado diversos desórdenes gastrointestinales..    

“Mi mamá andaba muy bien  porque este alcohol se le deshinchaban las piernas, sus dolores se le quitaban y ahorita con tanta pastilla se queja de dolores de estómago”, dijo una entrevistada.

Hay quienes optan por sembrarla para uso propio a pesar de que está prohibido.

Sembrada en casa

“¿No la conocías?”, pregunta él con sorna, “sí, ésta es la famosa planta de mariguana”, dice.

Sobre la mesa de su oficina hay una maceta en la que está enterrado un arbolito de hojas muy verdes.Dice que se trata de una planta macho de cannabis, de esa que no se fuma.

Hace algunos meses unos estudiantes foráneos que se hospedaban en la privada de departamentos donde él vive, le regalaron unas semillitas, él las planto y salió mariguana.  

Cuenta que él la utiliza desde que jugaba con el equipo de futbol americano de la universidad. Una señora de Real de Catorce se la recomendó mezclada con alcohol del 96 y peyote, peyote, dice, para paliar los dolores que le dejaban las tacleadas.

Ahora la usa para calmar sus reumas en la espalda, en las rodillas, en los codos, en las manos. Las secuelas que le quedaron de cuando jugaba americano.

Por esos días conocí también otros casos de atletas, beisbolistas y futbolistas de Saltillo, que usan la clásica mezcla de mariguana, alcohol y peyote, para revertir el cansancio en las piernas y los dolores producidos por golpes durante las competencias. 

Cuando el dolor es intenso, la mezcla se aplica en los coyunturas y en un lapso de menos de un minuto, dos minutos, se quita la sensación del dolor y ya.

Se usa de preferencia en las noche para dormir bien después de un baño.

Está diciendo él, arranca unas cuantas hojitas de la planta y las mete en un frasco con alcohol del 96 y peyote, peyote, dice,  potencializa el afecto analgésico de la mariguana.

Asegura que este remedio es más efectivo que cualquier medicina.

Él es ingeniero agrónomo y sabe de eso.

“Somos ingenieros agrónomos, que no tengamos fe en las plantas, pues ya, sería algo contradictorio”, afirma.

Y con este remedio se ahorra en analgésicos, en antihistamínicos.

“En mi familia lo tenemos en el botiquín, este frasco es como una medicina más del botiquín y si hay algún golpe, una caída, un torzón, que amanecimos torcidos del cuello, te aplicas tantito y se acaba el malestar”.

Luego me pregunta riendo que si apoco no vi la planta de mariguana cuando entré por la cochera de la privada de departamentos donde vive.

Él la tiene ahí para que agarre sol y aire, con todo y que el portón de la calle siempre está abierto y pase gente.

A veces llegan vecinos o conocidos y él les reglamos tantita, se la llevan.

“¿Te  quieres llevar?”, ofrece.