Arropada por la ancestral técnica de la caligrafía oriental, Laura Castanedo realiza en ‘Chehunn: Indicios Trashumantes’ una comunión con lo más antiguo de su pasado, visitando además la ciudad para difundir la tradición del método seoye. 

Laura Castanedo es originaria del estado de Baja California, se ha dedicado a la pintura y la actuación, sin embargo desde hace 20 años también le entregó su talento a la caligrafía coreana seoye, técnica sobre la que reposa esta exposición realizada con motivo del cuarto aniversario del Museo de Artes Gráficas.

Castanedo explicó para VANGUARDIA que fue gracias a un maestro coreano que tuvo su primer acercamiento con este estilo caligráfico con una intención de ocio principalmente.

Concentrándose en la danza que los trazos implican poco a poco fue desarrollando su técnica hasta que en 2005 fue invitada a la bienal de Jeollabuk- Do en Corea, el sitio de mayor tradición calígrafa en aquel país, ahí comenzó a adjuntar la caligrafía en su propuesta artística con más apego. 

Para realizar esta técnica requiere únicamente de los elementos básicos ‘Munbangsawoo’ o los cuatro tesoros del estudio: el papel, el pincel, la tinta y la piedra.

Para poder realizar correctamente la técnica, el artista debe cobrar un estado de ánimo en el que se acerca a sus tesoros con respeto y meditación activa, buscando la belleza desde el corazón y un espíritu sereno para convertir el propio cuerpo en un trazo. 

Es así como Laura decide buscar en su propio pasado aquella armonía, encontrando en las pinturas rupestres de su ciudad natal la liga que estaba buscando. 

“He recorrido distintos sitios de la Baja California donde hay vestigios de 5 etnias básicas como los Cochimí, los Kukapá, Kumiai, Paipai y Kaliwa, que eran tribus errantes seminómadas que en su recorrido fueron dejando indicios o marcadores para los que venían después” explicó Castanedo.

Aseguró que aunque las investigaciones oficiales sobre estas etnias en peligro de extinción son incipientes, actualmente cuentan con población viva cuyos ancestros se derivan aproximadamente de hace 10 mil años, aunque no es posible identificar la autoría de las pinturas. 

Dentro de estos marcadores, Chehunn hace alusión particularmente a los sitios denominados El Vallecito, Piedras Gordas, Cataviña y Montevideo, lugares ricos en pintura rupestre. 

“Participo en la bienal desde 2005. Esto tiene mucho que ver de dónde viene el trazo y era imposible mostrarles algo ajeno a mi ser, es por eso que hice esta combinación”, menciona. 

Explicó además que en la técnica caligráfica lo que se intenta es llegar al primer trazo que hizo aquella persona que dibujó por primera vez (en este caso) la pintura rupestre, ya que la filosofía oriental se concentra en llevar el estado humano a aquellos momentos en donde nos manteníamos más cercanos a lo esencial, lo puro y la naturaleza.

Tras la invitación a visitar Saltillo por parte de la directora del MAG Olga Margarita Dávila en septiembre de 2005, castanedo se dedicó a explorar en papel, movimiento y fondo lo que seleccionaría para llegar a la ciudad. 

Todo inició durante sus primeras exploraciones de los sitios antiguos que ha investigado durante largo año, y para aterrizarlo en papel requiere largas sesiones de meditación y práctica que puede resultar en repetir el trazo entre 400 y 500 veces si es necesario.

“Pasas un día entero meditando sobre la imagen, porque la caligrafía se trata de reinterpretar, al comenzar experimentas los formatos repitiendo y repitiendo y al final del día escoges cuál te gusta más para después quemar el resto. Si no te gusta ninguno, vuelves a comenzar al día siguiente” dijo. 

No es hasta que el calígrafo se siente satisfecho que se puede firmar la obra, y a pesar de lo exhaustivo, Castanedo asegura creer y disfrutar el estado de trance meditativo en el que se sumerge cuando realiza el seoye. 

Además de la exposición, Castanedo ofreció talleres con artistas, niños con síndrome de down y alumnos de la Universidad del Valle de México, y asegura que en estos ha podido encontrar una función de la caligrafía más allá de la comunicación. 

“He dado este taller varias ocasiones para niños con down y puedo ver que ellos lo disfrutan mucho porque independientemente del resultado estético a ellos les da una herramienta de meditación y tranquilidad, un ejercicio para dejarse ir en un proceso porque te tienes que convertir en el pincel y volverlo parte de ti” aseguró.

Asegura que a diferencia de occidente, en oriente la tradición de la caligrafía y el dibujo son importantes y obligatorias diariamente, mientras que de este lado la caligrafía es un ejercicio que se utiliza con regularidad para la rotulación. 

“En oriente se concibe como un oficio, casi como un arte menor que igual están desplazando las computadoras y las impresiones en lona, pero la rotulación tendrá siempre su encanto y siempre tendrá su lugar, cada vez la gente se interesa más nuevamente”, aseguró. 

La bajacaliforniana es miembro del proyecto ‘The Big Read’ que el Instituto de Cultura de Baja California que tiene como objetivo realizar a nivel multinacional actividades en torno a la lectura de un libro cada año que será leído por niños, jóvenes y adultos.

Este año el libro que los mediadores como Laura trabajarán en sus círculos de lectura será Fahrenheit 451 de Ray Bradbury y se convocará a personas que leerán un fragmento del libro para después hacer un video de registro para The Big Read. 

De igual forma la convocatoria hace apertura a lectores que quieran grabar en video su fragmento favorito o sus traducciones visuales acerca del libro. 

LECTURA: HÁBITO VITAL
Castanedo comentó a VANGUARDIA que trabaja en el proyecto The Big Read, un proyecto de lectura realizado en algunas bibliotecas públicas de E.U. y en ciudades fronterizas de México. 

En su turno Laura Castanedo leerá y será la moderadora del debate entorno al libro Fahrenheit 451 de Ray Bradbury, un texto que permite explorar las consecuencias que atravesaría una sociedad sin el hábito de la lectura, y que las sesiones se llevarán a cabo en aulas escolares y centros culturales en Tijuana.
Se espera más adelante la integración de la librería ‘El Grafógrafo’ que tiene como intención realizar podcasts ya sea con las sesiones de discusión sobre la novela.

Taller con Laura Castanedo 
> Universidad del Valle de México
> 6 de abril 
> A partir de las 17:00 horas
> Entrada libre

¡No te lo pierdas!
Chehunn: Indicios trashumantes
> Museo de Artes Gráficas
> Hasta el 15 de abril
> De 10:00 a 18:00 horas
> Entrada libre

Taller para niños especiales 
Caligrafía Seoye
Museo de Artes Gráficas 
6 de abril 
De 11:00 a 13:00 horas
Para niños con síndrome de down