Destaca a Nivel Internacional el Campus de la Universidad Carolina por su arquitectura
Por su arquitectura innovadora y amigable con el medio ambiente, la Universidad Carolina fue reconocida a nivel internacional en Wallpaper Magazine, como un espacio que impacta con su inspiracional diseño.
La revista que celebra el diseño, la arquitectura, la moda y el arte, posicionó a la universidad saltillense como ejemplo de México, poniéndola en el mapa de la arquitectura educativa junto a campus de Reino Unido, India, Holanda y China.
“Rodeada de nogales y pinos, la Universidad Carolina emerge de una pequeña parcela boscosa”, describe la publicación. “El juego de luces a través de las hojas se suma al placer sensorial de caminar por la arcada, que atraviesa la fachada principal”.
Alejandro Madero, fundador y director de Roma212; Manuel Martínez, fundador y director de Taller Arquitectónico; y Yolanda Ceballos, fueron los arquitectos detrás del diseño que además de servir como espacio educativo, involucra a los alumnos con la naturaleza que los rodea.
El master plan del campus de la Universidad en donde se ubica el edificio que se comenzó a construir en el 2015, fue desarrollado por Javier Leal, Alejandro Madero y Ernesto Marroquín.
“Lo que se buscó fue encontrar un balance entre el entorno natural de este pequeño bosque urbano con las necesidades académicas de la universidad”, comentó Leal.
Detalló además que, el producto de este balance no solo fue reducir la huella de construcciones en el campus, sino aprovechar esta integración para crear en las personas empatía para el entorno natural.
La intención fue reflejar los principios de la Universidad, y crear así, un espacio honesto, de respeto y tolerancia, donde los alumnos puedan ser propositivos y que tengan experiencias positivas de convivencia.
“Tiene también la presencia del bagaje histórico de Saltillo como un productor de ladrillo, que fue algo que retomamos para la imagen del proyecto”, contó Martínez.
Desde el inicio, estuvieron muy involucrados Emanuel y Esteban Garza, rector y director de la Universidad Carolina, respectivamente. Para ambos era crucial proteger la vegetación original del terreno que ha sido cuidada por generaciones, por lo que se optó por un esquema de módulos desfasados, que componen los salones sin tocar los árboles.
Para los fundadores de la Universidad, la relación con la naturaleza, y el respeto a la flora y fauna han sido la piedra angular de las decisiones en función del crecimiento en edificios. La misión es cuidar al planeta y evolucionar de una forma integrada como un verdadero ecosistema.
“Los edificios no tienen recubrimientos, y presentan la sensibilidad de respetar todos los árboles, que tienen más de 80 años y tienen más derecho de estar ahí que nosotros”, dijo Martínez.
Los arquitectos decidieron ver la irregularidad de la parcela sobre la que se construyó como una ventaja, por lo que desarrollaron un modelo compuesto de dos salones, uno en planta alta y uno en planta baja, que funcionan estructuralmente como piezas independientes.
Sobre el reconocimiento de esta importante publicación, Madero afirmó que sin duda es un orgullo entrar en el radar internacional, pues a pesar de que se construyó hace tiempo, el diseño es tendencia.
“Queríamos un edificio que en su composición y en su imagen fuera atemporal, esa fachada arcada se pudo haber hecho hace 500 años, pero también se puede hacer dentro de otros 500 años, condensa el proyecto de tal manera que resulta atemporal”, explicó Martínez
