TORREÓN, COAH.- El gobernador electo de Coahuila, Miguel Ángel Riquelme Solís, negó categórico haya rebasado los topes en los gastos de campaña, sino por el contrario, dejó más de 2 millones de pesos para el cierre, pero después los consejeros modificaron criterios en la contabilidad lo que originó las dudas.

Los criterios se cambiaron de último momento, le cargaron un cobro en Facebook, además de un prorrateo que propuso de última hora la consejera Pamela San Martín, que elevó los gastos en más de 500 mil pesos.

El rebase en los gastos de campaña de casi un 8 por ciento, aseveró será revertido en los tribunales, aunque falta la última revisión del supuesto pago a los representantes de casilla y la comprobación de que ellos asistieron de manera voluntaria.

En la entrevista que concedió a VANGUARDIA, reiteró que el rebase a los topes de campaña no existe, por lo que no tiene la menor duda de que va a ser revertido en el Tribunal Federal Electoral.

El priísta dijo que esperará el último engrose que es la comprobación del gasto en representantes de casilla el día de la jornada electoral, proceso que no debería entrar, porque ya no se está haciendo proselitismo; sin embargo, el INE determinó que ese gasto se contabilizara como de campaña.

No obstante, el PRI ya comprobó que fue una gratuidad la participación de los representantes en las casillas.