POR JULIO MARCELO BRITO ALVISO PARA VISIÓN AUTOMOTRIZ

General Motors anunció que se producirá en México la SUV Chevrolet Blazer. Se trata de una SUV de tamaño mediano, que se ubica entre la Equinox y la Traverse. El mensaje es muy importante porque durante mucho tiempo el presidente de los Estados Unidos, Donald Trump rechaza cualquier inversión que se haga en México, especialmente de marcas automotrices de los EU. 

Al iniciar el mandato de Trump subió de tono las amenazas que inhibió algunas inversiones que se consideraban sólidas, como la producción de un auto subcompacto en San Luis Potosí, que terminó en China. Fue tal el impacto que Ford tuvo que pagar al gobierno potosino 200 mdd por la cancelación.

Toyota también echó para atrás con una planta programada en Guanajuato. Tenía la intensión de producir su famoso Corolla, el auto más vendido en el mundo. La producción se la llevó a Estados Unidos y en  Guanajuato producirá la pick-up Hilux.

General Motors ha sido el motor de las inversiones en México y una especie de pionero. En donde se plantan, al poco rato llegan otras marcas como sucedió en Coahuila, donde Chrysler le siguió los pasos, luego Guanajuato donde se asentaron Honda y Mazda y San Luis Potosí, donde llegó la BMW.

La señal de retorno a México significa que continuará siendo un eje importante en la estrategia de producto, especialmente de las SUV. Debemos recordar que los sedanes es un modelo que va en retirada porque el mercado prefiere SUV robustas.

POR JULIO MARCELO BRITO ALVISO PARA VISIÓN AUTOMOTRIZ