Usted está aquí
“Brexit” convertiría a Fráncfort en la plaza financiera alemana
“Brexit” abriría de que Fráncfort se convierta en la plaza financiera alemana
La posible salida de Reino Unido de la Unión Europea ¿sería una suerte para la plaza financiera de Fráncfort? Muchos expertos están seguros de que Londres perdería su posición como el centro más importante del continente para el capital, pero esta perspectiva tampoco desata el júbilo en la metrópoli alemana.
Fráncfort ya atrae en la actualidad al público internacional con su denso entramado de institutos financieros, pero pese a ello la Asociación de Bancos Extranjeros en Alemania advierte de crear falsas expectativas.
"A veces se oye aquí en el centro de la ciudad, y no sólo allí, que Fráncfort se beneficiará como plaza financiera de una salida de Reino Unido de la Unión Europea (UE)", afirmó su presidente, Stefan Winter, del banco suizo UBS.
"Creo que esas declaraciones son prematuras a la vista de las numerosas variables, desconocimiento e incertidumbres en torno a si Reino Unido abandona la UE", apuntó.
El hecho es que los bancos necesitan legalmente establecer una filial con sede en un país de la UE para poder prestar sus servicios en el interior del bloque.
Si se produjera un "Brexit", los negocios con clientes en la UE deberían "desplazarse junto con su personal e infraestructuras desde Reino Unido a la UE, y lo más probable es que lo hicieran a sitios como París, Dublín o Fráncfort", explicó el DZ Bank.
Los expertos del sector no creen que esto signifique en modo alguno que Fráncfort ganara la carrera como alternativa futura para las instituciones financieras.
La ciudad más grande del estado federado de Hesse parece estar a punto de reventar: escasean las viviendas asequibles y las calles sufren embotellamientos con frecuencia. A finales de 2015, casi 200 bancos tenían su sede establecida en Fráncfort, 80 por ciento de ellos institutos extranjeros. El sector bancario da trabajo a 62.500 personas en la ciudad del oeste de Alemania.
Fráncfort se publicita sobre todo recordando que en la ciudad todo queda a mano, incluyendo las sedes centrales de organismos de control como el Banco Central Europeo (BCE) y la Autoridad Europea de Seguros y Pensiones de Jubilación (EIOPA, por sus siglas en inglés).
Con la llegada del nuevo supervisor bancario del euro bajo el paraguas del BCE en 2014 el centro financiero más importante de Alemania se ha convertido "finalmente en la capital de supervisión europea", analizó el banco estatal regional de Hesse Turingia (Helaba).
Para Winter, de UBS, "el BCE podría tener un efecto imán, así como el gran número de trabajadores cualificados, buenas infraestructuras y, por último, aunque no menos importante, el hecho de ser (Alemania) la mayor economía de la UE".
"Sin embargo, las otras posibles localizaciones ya mencionadas también mostraron en el pasado una considerable creatividad cuando se trata de atraer a compañías internacionales", indicó.
Dublín, por ejemplo, tiene buenas posibilidades. Muchos consorcios empresariales financieros de Estados Unidos prefieren la capital de Irlanda por una cuestión idiomática.
El banco Citigroup ya ha anunciado su intención de trasladar su central europea de banca privada a Dublín. Su rival Wells Fargo ya gestiona desde la capital irlandesa su amplio negocio. Mientras, el suizo Credit Suisse inauguró allí un centro de operaciones.
También el Deutsche Bank se prepara para cualquier eventualidad. "Estamos preparados para todos los escenarios", afirmó su presidente, John Cryan, durante la asamblea general de accionistas. "Gracias a su fuerte posición en Fráncfort y Londres el Deutsche Bank podrá hacer frente a los efectos a corto y largo plazo de un 'Brexit'", agregó.
Ahora mismo, Londres es el corazón del negocio de banca de inversión del Deutsche Bank. Ante la pregunta de adónde movería sus actividades de Londres con cerca de 9.000 trabajadores en el caso de un "Brexit", Cryan aseguró en abril al diario "Financial Times": "Para nosotros, dado el caso, sería Fráncfort".
Pero al mismo tiempo el banquero británico alertó: "La gente mira muy poco el otro lado de la moneda, es decir qué significaría un 'Brexit' para Europa. Ahí decimos claramente que sería cualquier cosa menos bueno".
Hay mucho en juego con el referéndum para el parquet alemán. El consejo de administración de la Bolsa de Fráncfort (Deutsche Börse) acordó en marzo fusionarse con la London Stock Exchange (LSE). Si los británicos votan a favor de la salida de la UE esto supondría un gran coste para la Bolsa de Fráncfort ya que, como temen muchos accionistas germanos, la Bolsa de Londres sufriría graves pérdidas.
La forma en que se implemente al final un posible "No" de los británicos a la UE será fundamental a la hora de decidir si ha habido un ganador y de qué lado del Canal de la Mancha queda. Los economistas del Helaba ven como el escenario más problable un "contrato de divorcio" entre los británicos y la UE que permita a las dos partes salvar la cara.
Para la economista jefe del Helaba, Gertrud Traud, esto podría suponer que Reino Unido mantenga su posición como plaza financiera. "En este caso no se confirmarían las esperanzas de algunos actores financieros en Fráncfort de poder beneficiarse masivamente.”