Analiza UBS como la buena relación entre inversionistas y AMLO lo pueden llevar al triunfo de las elecciones

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Analiza UBS como la buena relación entre inversionistas y AMLO lo pueden llevar al triunfo de las elecciones

Foto: Cuartoscuro
Con una intención de convencer el mercado con un mensaje amistoso, junto con la descalificación de algunos candidatos independientes, podrían fortalecerlo aún más

De acuerdo a un estudio que realizó el banco suizo UBS, los últimos meses AMLO y sus asesores han estado intentando suavizar su postura en temas que anteriormente generaban preocupación entre los votantes, y que sus adversarios utilizaban para mostrar una caótica presidencia de AMLO.

Estos temas incluyen la reforma energética y el nuevo aeropuerto de la Ciudad de México. De hecho, la actitud de AMLO hacia otros políticos y el sistema electoral parece mejorar.

El mensaje no es siempre sencillo, pero una intención de cambiar la percepción de intolerancia o los planes de revertir las reformas estructurales son evidentes, según el banco.

AMLO alarmó a la industria energética el año pasado, cuando dijo que si fuera electo presidente, revisaría los contratos petroleros de la administración actual a quienes les habían concedido las licitaciones.

Sus principales asesores, ahora, están intentando calmar esos miedos. De acuerdo a ellos, AMLO no retirará la reforma energética o cancelará los contratos que ya se habían dado al sector privado.

 

 

 

 

No habrá cambios drásticos para la apertura de la industria, como las subastas de crudo que desde 2015 han sido muy transparentes y benéficas para el futuro energético y económico del país.

Los asesores también han estado mandando mensajes de que todo el programa económico del país será positivo para los mercados.

En el pasado, AMLO había declarado que cancelaría la construcción del Nuevo Aeropuerto de México porqué era innecesario y extremadamente costoso. Sus asesores ahora sugieren una diferente visión, diciendo que el sitio del nuevo aeropuerto es posible que no cambie, así como hacerlo podría afectar la imagen de México con los inversores.

En la campaña presidencial de 2006, AMLO declinó a participar en los debates presidenciales. Algunos lo consideraron como una sabia decisión, y otros los consideraron como un error, diciendo que eso lo pintaba como un candidato intolerante. Las últimas semanas, AMLO declaró que él participaría en los tres debates que se realizarán entre Abril y Junio, consciente de que él será el objetivo de ataques retóricos.

De acuerdo a UBS, el mercado podría reaccionar favorablemente a AMLO con sus nuevos mensajes y su acercamiento, lo cual podría potencialmente reducir las percepciones negativas acerca de él.

Si esto es sustentado y si el continúa reforzando una actitud orientada hacia sus inversores, y logra manejar sus reacciones de forma inteligente, ante posibles ataques durante los debates, de acuerdo al estudio del banco suizo, AMLO podría estar encabezando una sólida victoria el primero de Julio.