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Llegan a Saltillo alimentos chatarra con etiqueta con información nutrimental
Las nuevas etiquetas para bebidas y alimentos procesados con altos contenidos de azúcar, sodio, grasas y carbohidratos llegaron a Saltillo esta semana; sin embargo, son difíciles de encontrar porque los productos se han vendido y todavía no abunda la mercancía con estas advertencias.
En un recorrido hecho por VANGUARDIA se logró ubicar misceláneas y tiendas de autoservicio donde los productos chatarra ya cuentan con la etiqueta negra que advierte de los daños que puede provocar su consumo.
Este medio visitó supermercados y diversas tiendas, en la mayoría se puede observar que los productos como botanas, refrescos, galletas, entre otros, todavía no cuentan con la nueva etiqueta.
Sin embargo, al preguntar en otras misceláneas y tiendas de conveniencia, los encargados explicaron que efectivamente esta semana llegaron productos con la etiqueta negra y letras blancas, de la Secretaría de Salud, pero como eran pocos y se vendieron, los que ahora tienen en exhibición no muestran estas advertencias.
El 22 de octubre de 2019 por el Senado el Senado aprobó una reforma a la Ley General de Salud para modificar el etiquetado de alimentos y bebidas no alcohólicas, para advertir en el empaque si se trata de productos que exceden niveles de calorías, azúcares añadidas, grasas y sodio establecidos por la Secretaría de Salud.
Si bien es cierto que cada producto cuenta con un etiquetado frontal nutrimental (Guía Diaria de Alimentación) y una etiqueta de información nutricional en la parte posterior del empaque.
Sin embargo, especialistas, como en el Centro de Investigación en Nutrición y Salud del Instituto Nacional de Salud Pública, concluyeron que estas etiquetas no eran “la mejor opción para presentar contenido nutrimental de un producto, y por lo tanto, para que los consumidores tomen decisiones mejor informadas, más saludables sobre los alimentos que van a consumir”.
El objetivo de la SS es prevenir problemas de sobrepeso y obesidad a través de diversas estrategias, como mejorar la disponibilidad de alimentos y bebidas saludables en planteles de educación Básica, acceso al agua potable, publicidad y la advertencia en nuevas etiquetas.