Egipto, un maravilloso libro de historia a tamaño natural

Egipto puede resumirse como un maravilloso libro de historia a tamaño natural. Un país que todos asociamos con las pirámides y el Nilo, sin embargo puede ofrecernos mucho más. No en vano, aquí también podemos encontrar el Egipto de las maravillosas playas en el Mar Rojo, el Egipto de las grandes ciudades o el del desierto Blanco, los oasis y el valle del Sinaí.
Foto: Especial

Cuna de la antigua civilización egipcia, Egipto es un país con un pasado de esplendor que se refleja especialmente en sus espectaculares monumentos. Un destino que combina a la perfección el turismo histórico, de aventura y de placer para que ningún viajero pueda quedar indiferente. Los  Viajes a Egipto son siempre una opción perfecta.

Los grandes monumentos de Egipto

La necrópolis de Giza, situada a las afueras de El Cairo, copa algunos de los principales monumentos de Egipto. Es aquí donde podemos visitar las pirámides de los faraones Keops, Kefrén y Micerinos. Las tres están protegidas por la célebre Esfinge, una de las imágenes más icónicas de este país y de todo el mundo.

El Valle de los Reyes y el Valle de las Reinas es otro de los grandes patrimonios arqueológicos de este país. Aquí fue donde se descubrió en 1992 el tesoro de Tutankhamon. La ruta nos llevará también por las ruinas de la antigua Tebas, los templos de Luxor y Karnak y los templos de Gournah y Hatsepsut en Deir el-Bahari.

No obstante, hay otros grandes monumentos en Egipto a visitar. No habría que olvidar figuras como el coloso de Ramsés II, la esfinge de Memphis o las necrópolis de Saqqarah y Fayoum. También resultan imprescindibles para el viajero los templos y las sepulturas que se hallan en la llanura de Tanis.

 

Las ciudades de El Cairo, Alejandría y Asuan

La capital de Egipto, El Cairo, es un torbellino de cultura. Nada mejor que perderse por sus barrios viejos para descubrir sus viejas mezquitas de Ibn Tulun y al-Azhar o los monumentos coptos, como la Iglesia de San Sergio o la de la Sagrada Familia. Sin olvidarnos, por supuesto, del Museo Nacional de Antigüedades, en donde podemos apreciar el tesoro de Tutankhamon, el Museo Copto o el Museo de Arte Islámico.

El maravilloso legado de Alejandría se hace presente en la Ciudad de los Muertos y las excavaciones que pretenden recuperar lugares míticos de este lugar. Entre ellos, el famoso Faro de Alejandría, la isla de Cleopatra o la Gran Biblioteca de Ptolomeo I. Merece la pena también pasear por el paseo marítimo del Corniche y las callejuelas del barrio de El Mansheya para visitar el teatro romano.

La ciudad de Asuan vive un tanto a la sombra de los dos grandes destinos anteriores. Sin embargo, no hay que dejar pasar la posibilidad de visitar en sus alrededores las islas Elefantina y Sehel. Dos lugares que tienen como característica común sus pintorescas casas de colores junto al lago.

Egipto, por último, es también un paraíso de costa. En los últimos años se ha puesto de moda visitar el mar Rojo para bucear o el pequeño resort de lujo de Sharm el-Sheik, situado en la punta de la península del Sinaí.

Tal y como puede verse, Egipto es uno de los destinos turísticos más destacados en el mundo. Pueblos y ciudades, grandes monumentos y un valle del Nilo con paisajes deslumbrantes de desiertos y oasis conforman un escenario difícil de olvidar para cualquier viajero que se precie.