Aunque su padre, Rodrigo Rodríguez, de 71 años, dijo haberlo verlo por última vez el sábado, José Refugio Rodríguez de la Cruz, de 47 años, ya tenía más de una semana muerto en el cuarto donde vivía, en Luis Echeverría Álvarez.

Alrededor de las 11:15 horas de ayer, personal de la Policía Municipal y Fuerza Coahuila arribaron al domicilio marcado con el 2281 de Luis Echeverría, en la colonia Landín, donde se reportaba una persona sin vida. 

PARAMÉDICOS CONFIRMAN
Se pidió una ambulancia para confirmar el deceso y enseguida se dio aviso a las autoridades y personal de la Fiscalía General del Estado.

Peritos y agentes acudieron al lugar del incidente registrado, para iniciar las investigaciones.

Rodrigo Rodríguez dijo que vio a su hijo por última vez el sábado, pero las señales de putrefacción indicaban que el tiempo que pasaron sin verlo fue mayor; inclusive por parte de los que vivían en la parte baja del domicilio, pues cuando le llevaban de comer no respondía. 

Al sitio llegó una hermana del muerto, quien comenzó a reclamarle a su padre la falta de atención a su hermano, pues sabía que era diabético y no tenía movilidad y aún así no le ayudaba.

Debido al estado de putrefacción del cuerpo, los familiares decidieron incinerar a Cuco, como lo llamaban.