“Cualquier persona puede entrar en nuestros espacios, cafetería y baños, independientemente del hecho de que haya consumido, y viene considerado un cliente”. Con estas palabras la cadena americana Starbucks, del sábado 19 de mayo, ha anunciado un cambio de ruta de sus políticas empresariales.

Hasta la semana pasada, de hecho, sus empleados estaban autorizados a evaluar arbitrariamente si dejaban el libre acceso al negocio a los clientes que no consumían nada. La decisión ha sido tomada a un mes de la acusación de utilizar prácticas discriminatorias. El 12 de abril, el director de una de sus tiendas de Filadelfia, había hecho que la policía, arrestara a dos afroamericanos que habían pedido usar el baño sin haber consumado.

Lo ocurrido fue grabado y publicado en redes sociales, obligando al administrador delegado, Kevin Johnson, a publicar una carta de disculpa en la cual declaró: “Haremos todo porque en nuestros negocios este tipo de episodios no sucedan nunca más”.

La compañía ha declarado que la nueva política será aplicada a sus 8 mil tiendas presentes en territorio estadounidense. Por lo tanto, falta por definir si en los otros países serán tomadas en consideración las nuevas reglas. “No tenemos la intención de volvernos un baño público, ha declarado el presidente de Starbucks, Howard Schultz, a los periodistas presentes en una conferencia sobre la responsabilidad empresarial celebrada en Washington, y reportada por el Wall Street Journal.

Rashon Nelson y Donte Robinson, los dos chicos involucrados en el incidente de abril, fueron arrestados y obligados a permanecer por varias horas en la cárcel. Liberados de cualquier acusación, han llegado a un acuerdo con Starbucks para una compensación económica. El 29 de mayo todas las cafeterías Starbucks en la Unión Americana cerrarán por 24 horas, para permitir que cerca de 175 mil trabajadores participen en las lecciones contra la discriminación.

Con información de Repubblica