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Moviliza Londres al ejército para hacer frente a la “Bestia del este”
Gran Bretaña movilizó al ejército en el centro y oeste de Inglaterra para ayudar al personal hospitalario a llegar a sus puestos y para rescatar a las personas que quedaron atrapadas en sus vehículos por la nieve mientras una inusual ola de frío barre el país y parte del continente.
La gran helada provocó caos en todo el país, con cientos de vuelos cancelados en Heathrow, el eje de transporte aéreo más grande de Europa. Varios trenes se detuvieron y sus pasajeros quedaron varados durante horas.
"Es un clima particularmente inusual", dijo el secretario de Transportes, Chris Grayling. "Es algo que sucede muy rara vez en este país".
Otro hecho inusual fue el congelamiento de los canales en Ámsterdam. El hielo en el histórico canal de Prinsengracht era lo suficientemente grueso para que la gente pudiera patinar sobre la superficie. Las autoridades vedaron el paso de botes y cerraron las compuertas para permitir que se engrosara el hielo.
El ejército envió 20 soldados y 10 vehículos a Shropshire y la Marina Real atendió a la petición de ayuda de las policías de Devon y Cornwall desplegando efectivos allí.
Un tren que cubría el trayecto entre la estación de Waterloo, en Londres, y Weymouth quedó parado en las afueras de New Milton, dejando a conductores de autos varados durante horas. Miles de viviendas estaban sin electricidad mientras las temperaturas siguen en valores negativos, con vientos gélidos.
El aeropuerto londinense de Heathrow tuiteó el viernes que estaba trabajando con las aerolíneas para consolidar un calendario de vuelos y "dar más seguridad acerca de la salida de los vuelos", mientras se espera que el viento sople con fuerza en gran parte del país y en Europa. Se cancelaron más de 350 vuelos. Los aeropuertos Gatwick, London City, Edimburgo y Glasgow también anunciaron cancelaciones.
Otros aeropuertos de Europa, como el de Ginebra, suspendieron operaciones directamente.