Ciudad de México. El peso cerró en julio con una depreciación de 2.58 por ciento o 47.22 centavos, al cotizar en alrededor de 18.7526 pesos por dólar.

De acuerdo con Banco Base, a diferencia de otros meses, el tipo de cambio se mostró más estable en el séptimo mes del año, situándose entre 18 y 19 pesos por dólar; no obstante, se presentaron varios riesgos que empujan el tipo de cambio al alza.

Por ello, el grupo financiero no descarta niveles por arriba de 19 pesos por dólar y nuevos máximos históricos durante los próximos dos meses.

Entre los factores que presionaron al tipo de cambio al alza durante julio, destaca un deterioro en las condiciones de crecimiento internas de México durante la primera mitad del año. La inversión fija bruta, las exportaciones y la actividad industrial mostraron una desaceleración.

En tanto, a nivel global se observó un incremento en las preocupaciones acerca del crecimiento, ya que el Fondo Monetario Internacional recortó su previsión a nivel mundial para 2016, de 3.2 a 3.1 por ciento.

Refiere que este mes se especuló sobre la posibilidad de que la Reserva Federal (Fed) subiera su tasa de referencia durante la segunda mitad del año; aunado a que tras alcanzar niveles por arriba de 50 dólares por barril, los precios del petróleo de nuevo muestran una tendencia a la baja.

También menciona el inicio de las campañas electorales en Estados Unidos, con las candidaturas oficiales de Donald Trump, por el Partido Republicano, y de Hillary Clinton, por el Partido Demócrata, lo que generará presiones al alza para el tipo de cambio de mostrarse mayor probabilidad para el primero.

Banco Base añade que durante julio, el peso llegó a un mínimo de 18.1161 y un máximo de 18.9775 pesos por dólar al mayoreo. Al cierre de esta jornada, las cotizaciones interbancarias a la venta se ubicaron en 18.7541 pesos por dólar, 1.3232 dólares por libra y en 1.1177 dólares por euro.