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Riley Keough luce sensual en 'The Girlfriend Experience'
Pasadena.- Tras su participación en la cinta Mad Max: Furia en el camino, Riley Keough, nieta del legendario Elvis Presley, se prepara para incendiar la pantalla chica.
La actriz protagoniza The Girlfriend Experience, basada en el filme homónimo de Steven Soderbergh, quien ahora funge como productor.
De acuerdo con Lodge Kerrigan, otro de los productores ejecutivos de esta historia, Riley fue la indicada para interpretar a Christine Reade, una prostituta de lujo que cobra diez mil dólares por noche.
"Me parece que Riley tiene una técnica actoral tremenda. Es muy carismática y tiene una personalidad magnética. Y de algún modo ella tiene una cierta inocencia natural que nos pareció sería muy atractiva para la serie”, dijo en conferencia de prensa.
Para Amy Seimetz, directora y actriz del proyecto, Riley también salió airosa de las distintas y muy complejas situaciones por las que hicieron atravesar a su personaje a lo largo de 13 episodios.
"Ella es increíblemente compleja. La pusimos en situaciones verdaderamente extrañas, que no siempre fueron buenas o divertidas e incluso fáciles de digerir. Y ella lo entendió todo porque le gustaron mucho los guiones que le entregamos. Fue muy fácil contar todo lo que se nos ocurrió porque su actuación fue increíble. Además, pienso que Riley entendió la humanidad que hay en Christine”, dijo.
The Girlfriend Experience cuenta la historia de Christine Reade (Keough), una joven estudiante de abogacía en la ciudad de Chicago, quien se incorpora como pasante en la firma Kirkland & Allen. Ella trabaja duro para ser reconocida en su nuevo puesto, pero pronto cambiará su foco de atención cuando una compañera de clases la introduzca al mundo de las escorts.
En la serie son conocidas como GFE, mujeres que ofrecen la llamada girlfriend experience, es decir, comparten intimidades comunes con parejas ya establecidas, convirtiéndose en sus amantes y confidentes a cambio de un pago.
En un intento por combinar dos estilos de vida completamente diferentes y opuestos, Christine se sumergirá rápidamente en este mundo, atraída por el ritmo vertiginoso del control y la intimidad.
"Elegimos representar un mundo muy específico, que es el de acompañantes de alto nivel, en el que están recibiendo miles de dólares pagados por hora. Esto conlleva también que se vean hoteles lujosos y cosas como esas. La atmósfera puede ser oscura, pero no estamos juzgando si es bueno o malo.
"No estamos hablando de las personas que son forzadas a la prostitución. Ése es un mundo totalmente distinto. Ésta es una mujer que eligió esta profesión. No glorificamos esta práctica, ni tampoco decimos que es una forma horrible de ganarse la vida. Lo que estamos tratando de hacer es simplemente representar algo que pasó, y permitir que el espectador muestre sus propias emociones y su juicio”, comentó Seimetz.
La serie, según Lodge Kerrigan, trató de respetar la estética de la película, además que se trató de hacer un proyecto con altas dosis de realismo.
"En cada locación tratamos de utilizar luz natural aunque en la noche recurrimos un poco a la iluminación artificial”, concluyó.