Un mes después de haber sido liberado por un juez bajo la medida cautelar de brazalete electrónico, un ramosarizpense asesinó a su compañero de parranda y ya fue localizado por la Policía Investigadora.

El asesinato de Martín Castillo Díaz ocurrió el fin de semana en las calles de la colonia Villasol, en Ramos Arizpe, tras el cual fue localizado Iván Enrique Gamboa Solís, de 26 años, quien porta un brazalete electrónico en su pie derecho ya que enfrenta una causa penal por el delito de robo a domicilio en el Centro de Justicia Penal.

El 22 de febrero del presente año una juez le concedió beneficio de la libertad con la instalación de dicho aparato para ser monitoreado vía satélite.

En sus primeras declaraciones el ahora imputado ante el Ministerio Público asegura que conocía a Martín, y el domingo por la madrugada lo invitó a tomar cerveza a su casa, en Obsidiana 303 de la colonia Villasol.

Ya pasados de copas, asegura que Martín se portó agresivo y llegó al grado de hacerle propuestas indecorosas a la esposa Iván Enrique, por lo que discutieron.

Más tarde Iván detectó que del puesto de hamburguesas que atendía su esposa, en el exterior de la casa, le hacía falta dinero de las ventas que ascendían a los mil 200 pesos en efectivo.

Optó por reclamarle al amigo y la situación se complicó, pues Martín sacó una navaja y al tratar de encajársela a Iván, logró esquivar la herida; Iván regresó al puesto de hamburguesas y tomó el cuchillo con que el partían la carne, encajándoselo en la espalda.

Luego de la agresión asegura que Martín corrió y lo siguió provocando con insultos y amenazas, señala que lo siguió pero al no darle alcance lo dejó que se alejara.

Con tal de no verse envuelto en problemas con los amigos del que creyó lesionado, optó por cerrar el negocio y su casa, pero nadie llegó a buscarlo.

Fue el domingo por la mañana cuando elementos de la Policía Investigadora se presentaron a su domicilio, y al ser cuestionado sobre el pleito que sostuvo con el compañero de parranda, lo aceptó.

Dentro de su casa les hizo entrega del cuchillo con el que lo hirió de muerte y fue llevado ante la 
agencia del Ministerio Público, donde horas más tarde fue puesto en libertad.

Ahora se mantendrá a la espera a que un juez lo mande citar al Centro de Justicia Penal por orden de aprehensión para que afronte el delito de homicidio simple doloso, y espera que le den beneficio porque alega legítima defensa.