María Esther Torres de López  fue recordada por amigos y familiares como una mujer trabajadora, alegre, tenaz y directa. Isidro López Villarreal, alcalde de Saltillo y su sobrino, aseguró que siempre fue un ejemplo de fe, como todos en casa de sus abuelos.  

“Era mi tía, hermana de mi padre, y definitivamente un gran ejemplo. Una persona muy convencida de lo que tenía que hacer, participaba siempre sirviendo con una fe muy grande, siempre fue un gran ejemplo de como son los saltillenses.

Ella siempre fue muy firme y muy directa, no andaba con rodeos y no le daba vuelta a las cosas, es una de las cosas que más nos quedan en la mente”. 

CRUZ ROJA RINDE HOMENAJE
Manuel Elizondo, delegado de la Cruz Roja en Coahuila, aseguró que María Esther no solo dejó bases asentadas en la Cruz Roja de Saltillo, sino que también lo hizo en la delegación de Coahuila cuando estuvo al frente de la presidencia del Patronato de Damas Voluntarias. 

“Fue una mujer siempre muy entregada a su trabajo pues supo cómo amalgamar a un grupo de damas y a un grupo de voluntades para poder prestar los servicios que durante muchos años estuvo al frente de ella. 

Recuerdo que en la época de las colectas que le tocó a ella encabezar, María Esther era de las que llegaban a las siete de la mañana, hacía los planes y distribuía el trabajo y le daban las 12 de la noche y trabajando. Ella se entregó, la Cruz Roja que es ahorita, ella dejó las bases necesarias para que se asentara el trabajo que se está haciendo en la actualidad”.