El abridor de los Dodgers de Los Ángeles, Walker Buehler, fue el mismo lanzador que realizó un sin hit ni carrera en el encuentro donde el club angelino se vio las caras contra los Padres de San Diego, dentro de territorio mexicano.

Buehler, mano derecha del equipo de los Dodgers, ya tiene en su historial el nervio y la astucia para afrontar un partido de gran magnitud.

En él, está la tarea de acabar con el paso victorioso de los Medias Rojos de Boston, que, de vencer en el tercer enfrentamiento del Clásico de Otoño entre ambos, podrían irse arriba en la serie 3-0 y estar a sólo un paso de ponerse el anillo de campeones.

Fue el 4 de mayo del año en curso, cuando el lanzador de 24 años le tocó no permitir ni un sólo embate de los Padres en Monterrey, algo que lleno de orgullo al lanzador norteamericano.

“Fue un día emocionante", recordó Buehler. "No me di cuenta por completo de lo que estaba pasando. Lo supe al final de mi salida y luego llegaron a lanzar los tres relevistas. Eso sí fue emocionante”.

Walker lanzó los primeros seis innings sin hit y le siguieron Tony Cingrani, Yimi García y Adam LIberatore.

“Es un muy buen equipo visto por todos lados”, dijo Buehler. “Pero que ahora tenga que batear el pitcher, volviendo a nuestro estilo de béisbol es algo que nos ayuda. Así que espero que podamos sacar ventaja de eso”.

Para Walker, el reto de este viernes será uno de los más importantes de su carrera, y que de caer, en teoría, podrían despedirse del sueño de un campeonato.