Volkswagen planea llamar a talleres a cinco millones de automóviles

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Volkswagen planea llamar a talleres a cinco millones de automóviles

El presidente del grupo Volkswagen Matthias Müller durante una rueda de prensa. Foto EFE/Julian Stratenschulte
VW manipuló las emisiones de los motores diésel con un software que activaba un mecanismo durante los controles, pero que se desactivaba en carretera.

Wolfsburg, Alemania.-  El gigante automotor alemán, Volkswagen, anunció hoy un plan de acción, que incluye llamar a talleres a cinco millones de automóviles, de cara al escándalo por la manipulación de las emisiones de sus motores diésel que ha sacudido los cimientos del grupo que engloba a doce marcas.

Con este plan de acción presentado por el nuevo jefe de Volkswagen (VW), Matthias Müller, quieren solucionar el problema del software instalado en los motores diésel para activar un mecanismo para limitar las emisiones al ser sometido a un control.

Tras una valoración interna existen cerca de cinco millones de automóviles de la marca VW entre los once millones de coches afectados en todo el grupo. Los clientes de VW afectados serán informados por correo próximamente si sus vehículos diésel deben ser sometidos a una modificación, informó el grupo automotor.

VW ni quiso, no obstante, entrar en detalles. "Volkswagen y las demás marcas afectadas del grupo quieren presentar las soluciones técnicas en octubre a los organismos pertinentes", agregó sobre las doce marcas entre las que se encuentran Audi y Seat, entre otras.

Sólo el arreglo técnico de los motores manipulados por Volkswagen le costarán a la compañía 6.500 millones de euros (7.300 millones de dólares), informó hoy la revista especializada "Automobilwoche".

Esto significa que la provisión reservada por el grupo VW de sus resultados del tercer trimestre (6,500 millones de euros) no será suficiente para hacer frente al elevado coste económico que supondrá el escándalo para el mayor fabricante automotor de Europa.

Estos datos fueron facilitados por el director financiero, Hans Dieter Pötsch, como respuesta a una pregunta al respecto de los mánager de la compañía, a la que tuvo acceso la publicación alemana.

Los 6,500 millones de euros reservados actualmente servirán para hacer frente, sobre todo, a los arreglos tecnológicos cuando se llame a talleres a los vehículos con los motores manipulados.

Pero a esto hay que sumarle posibles indemnizaciones, gastos de abogados y otros costes.

El recién elegido jefe de VW, Matthias Müller, -en sustitución de Martin Winterkorn- prometió de nuevo el lunes una "explicación sin reservas y consecuente". El ex jefe de Porsche explicó también que el grupo VW se enfrenta "a la mayor prueba" de su historia.

VW manipuló las emisiones de los motores diésel con un software que activaba un mecanismo durante los controles, pero que se desactivaba en carretera.

A pesar de que el grupo automotor reconoció que existen 11 millones de automóviles en todo el mundo con uno de esos motores, Müller indicó que este software sólo está activado en una parte de ellos. "Por ello calculamos que el número real de vehículos afectados será menor".

La cúpula del consejo de supervisión de VW se volverá a reunir este miércoles por la tarde para seguir analizando la grave crisis y se espera que se presente un primer informe de la situación, según informaciones de dpa.

De momento, el vicecanciller alemán y ministro de Economía, Sigmar Gabriel, alertó hoy de que el escándalo no debe acabar costando puestos de trabajo.

"Queremos hacer todo lo posible para que Volkswagen vuelva a encontrarse en una situación estable, no por sus directivos, sino por sus 600.000 trabajadores", indicó durante una reunión de la fracción parlamentaria del Partido Socialdemócrata (SPD) en el Parlamento alemán.

"Explicación, procesos penales, cooperación con Estados Unidos, nada de minimizar, nada de oscuridad ni encubrimiento. Es a lo que tendrá que hacer frente Volkswagen. El otro deber es que la política ayude también para que todo el asunto no acabe convirtiéndose en un desastre que pase factura a los trabajadores", declaró.

Gabriel reclamó así dos cosas: "esclarecer lo sucedido, pero velar al mismo tiempo porque nadie que allí trabaje tema por su empleo”.