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Vladimir Putin podría gobernar hasta el 2036
Los legisladores rusos aprobaron rápidamente hoy una serie de cambios constitucionales que podrían permitir que el presidente Vladimir Putin permanezca en el poder hasta 2036.
Si Putin ganara las elecciones y completara dos mandatos más como presidente, acabaría gobernando Rusia durante 36 años, más tiempo que cualquier otro líder en la historia moderna.
Las iniciativas de reforma constitucional aún deben ser aprobadas por el Tribunal Constitucional del país y por un referéndum nacional el próximo mes, antes de que entren en vigor.
Los detractores de Putin llamaron a realizar protestas públicas y condenaron los cambios como una forma de mantener al presidente ruso en el cargo después de que termine su mandato actual, en 2024.
La Duma Estatal, la cámara baja, que está controlada por el Kremlin, respaldó una serie de enmiendas a la Constitución y una cláusula que reinicia la cuenta de mandatos de Putin una vez entre en vigencia la Constitución revisada. Fueron aprobadas por 383 votos a favor, ninguno negativo y 43 abstenciones.
Varias horas después fue aprobada por la cámara alta, el Consejo de la Federación, con una votación de 160-1 y tres abstenciones.
No está claro cuándo dictaminará el Tribunal Constitucional, pero el referéndum sobre las enmiendas fue programado para el 22 de abril.
Putin, un exagente del KGB de 67 años, lleva más de 20 años dirigiendo Rusia, convirtiéndose en el gobernante más antiguo del país desde el dictador soviético Joseph Stalin, quien estuvo en el poder durante 29 años.
Tras gobernar dos mandatos consecutivos de cuatro años, un límite establecido en la versión actual de la Constitución, Putin pasó al puesto de primer ministro en 2008, cuando su aliado Dmitry Medvedev se convirtió en presidente nominal, pero sin el ejercicio formal del cargo.
Durante el mandato de Medvedev se amplió a seis años el mandato presidencial y Putin volvió al Kremlin como presidente en 2012. En 2018 fue reelegido para otros seis años.
Putin resitió múltiples tormentas internacionales durante su mandato. La anexión rusa en 2014 de la península ucraniana de Crimea aumentó sus índices de aprobación, que se han mantenido altos a pesar de los problemas económicos de Rusia en medio de un enfrentamiento con Occidente.
Putin usa esas tensiones para consolidar el apoyo popular y fortalecer su imagen como un líder fuerte frente a la presión extranjera.
La propuesta de reiniciar la cuenta de mandatos para el presidente fue presentada por la excosmonauta soviética Valentina Tereshkova, ahora diputada de la Duma, durante la segunda lectura de las enmiendas el martes. Tras su discurso, Putin llegó rápidamente al Parlamento para dirigirse a los legisladores y apoyó la idea.
El Tribunal Constitucional deberá revisar ahora la iniciativa, pero eso se considera ampliamente como una mera formalidad.
Otros cambios aprobados redistribuyen los poderes ejecutivos del gobierno ruso en Moscú y refuerzan el poder de la presidencia, además de prohibir el matrimonio homosexual e incluir "una creencia en Dios" como uno de los valores tradicionales rusos.