Viva un San Valentín de cine

Usted está aquí

Viva un San Valentín de cine

FOTO: Internet
Algunas son trágicas otras un poco cómicas y la mayoría de ellas inolvidables. El 14 de febrero es el día perfecto para disfrutar de esas historias de amor que nos brinda el séptimo arte, ya sea acurrucados en el sofá con nuestra pareja o en la atmósfera envolvente de una sala de cine.

A veces las historias de amor de las películas superan lo meramente cinematográfico. Este es el caso de “Bohemian Rhapsody”, la cinta que cuenta la historia de la mítica banda de rock Queen y, con ella, el particular romance de Freddie Mercury y Mary Austin. 

Los actores que les dan vida, Rami Malek y Lucy Boynton, se enamoraron durante el rodaje y ya han hecho pública su relación. Pero “Bohemian Rhapsody” le ha reportado a Malek, de momento, otras dos grandes alegrías: un Globo de Oro y una nominación al Óscar a mejor actor.

Otras películas no están basadas en hechos reales pero muestran sentimientos universales. “Life Itself” (2018) es una de esas historias para disfrutar con la pareja. Aunque en realidad no es una sola historia sino muchas que abarcan varias generaciones y dos continentes. 

Todo comienza con una fiesta universitaria  en la que se conocen los dos protagonistas, interpretados por Oscar Isaac y Olivia Wilde. En el reparto hay otros grandes actores como Samuel L. Jackson, Antonio Banderas y Sergio Peris-Mencheta.

ROMANTICISMO NOSTÁLGICO.

Para los más nostálgicos siempre está la opción de rescatar uno de los clásicos del cine. De hecho, San Valentín es un momento inmejorable para volver a ver películas míticas con grandes historias de amor como “Casablanca” (1942). 

El film, protagonizado por Humphrey Bogart, Ingrid Bergman y Paul Henreid narra una historia de amor a tres bandas en la ciudad de Casablanca (Marruecos) durante la II Guerra Mundial.

 Allí llegaba gente de toda Europa huyendo del nazismo, pero salir de la ciudad no era tan fácil. Entre los fugitivos están Víctor Laszlo (Paul Henreid), líder de la resistencia checa, y su esposa Ilsa (Ingrid Bergman), que tienen sus esperanzas puestas en unos salvoconductos que posee Rick (Humphrey Bogart), antiguo amante de ella.

El rodaje de “Casablanca” dejó innumerables anécdotas. Por ejemplo, las escenas finales de la película se rodaron sin que los actores supieran cómo terminaba la historia, para desesperación de Ingrid Bergman que no sabía de quién debía estar verdaderamente enamorada. 

También se cuenta que hubo un problema de altura entre Bogart y Bergman, ya que ella era unos centímetros más alta que él, cosa que incomodaba al actor y que hizo que tuviera que emplear varios trucos para disimularlo, como subirse a un escalón, utilizar alzas en los zapatos o sentarse sobre cojines cuando aparecían juntos en una escena. Además, Casablanca posee una de las bandas sonoras más reconocibles de la historia del cine: “As Time Goes By”.

FOTO: Internet

LA QUÍMICA ROBERTS-GERE.

Otra película con una banda sonora emblemática es “Pretty Woman” (1990), protagonizada por Julia Roberts y Richard Gere. El film, que viene a ser una versión noventera del cuento de la Cenicienta, que muestra cómo se enamoran dos personas procedentes de clases sociales muy distintas, ya que ella es una prostituta y él un hombre de negocios que contrata sus servicios. 

La que iba a ser una historia realista y cruda que hablaba de drogas y marginalidad acabó convertida en la comedia romántica que todos conocemos. 

Pero no sólo hubo cambios en el guión sino que, además, se barajaron otros muchos actores y actrices antes de optar por Roberts y Gere. Así, el director pensó primero en Karen Allen y, tras su negativa, recurrió a Meg Ryan, Sarah Jessica Parker, Michelle Pfeiffer, Kim Basinger entre otras actrices, antes de ofrecerle el papel de Vivian a Julia Roberts.

Algo similar ocurrió con el protagonista masculino, para el que se barajaron nombres como Christopher Reeve, Denzel Washington, Daniel Day-Lewis, Sylvester Stallone o Al Pacino, por ejemplo. 

Pero finalmente fueron Julia Roberts y Richard Gere las caras visibles de una cinta que se ha convertido en un hito del cine, una de esas películas que todo el mundo ha visto y no sólo una vez.

Pero si cuando suena el tema “Oh, Pretty Woman” todos recordamos a Julia Roberts cargada de bolsas, cuando escuchamos “Love Is All Around”, la imaginación nos lleva hasta Londres, donde se desarrollan varias historias de amor, todas conectadas entre sí de alguna manera. 

Aunque “Love Actually” (2003) transcurra en época navideña, es un film muy apropiado para San Valentín por su gran romanticismo y ternura.

En esta película el amor está realmente en todas partes, ya sea en el colegio, donde un niño que acaba de perder a su madre se queda prendado de una de sus compañeras; en el aeropuerto; en la oficina, en la que una abnegada trabajadora no se atreve a declararse a su apuesto colega, o en la mismísima residencia del primer ministro del Reino Unido.

Estas son sólo algunas opciones pero hay infinidad de títulos adecuados para estas fechas, como “Titanic”(1997), “Ghost” (1990), “The Notebook” (2004), “Shakespeare in Love” (1998), “Notting Hill”(1999) o “Le fabuleux destin d'Amélie Poulain” (2001), entre muchos otros. Las posibilidades son muy amplias cuando se trata de vivir un San Valentín de película.