En una batalla entre dos ritmos contrastantes, Virginia desaceleró el ritmo lo suficiente como para escapar del gigante asesino Auburn, 63-62, el sábado en la Final Four, ganando un lugar en el juego del Campeonato Nacional el lunes.

Con 0.6 segundos en el reloj, el escolta de Virginia, Kyle Guy, realizó tranquilamente tres tiros libres para sacar el triunfo, tras una polémica decisión arbitral.

Virginia perdía 62-60 cuando Samir Doughty le hizo una falta a Guy en la última jugada del juego. La frenética designación puso a los fanáticos de Auburn echando humo.

Con cinco minutos para el final, Tigers regresaron con asalto y parecía que el sembrado No. 5 iba a ganar algo más de magia de torneo. Los actos heroicos de Bryce Brown en los minutos finales (tres tiros finales de tres puntos) hicieron que pareciera que los Tigers se dirigían al juego por el título nacional.

Pero Virginia no se dejó.

El único sembrado número 1, ha estado escribiendo una historia de redención durante toda la temporada, motivado por el malestar histórico del año pasado cuando cayó ante el sembrado número 16 del condado Maryland-Baltimore.