La embotelladora de refrescos Coca-Cola Femsa (KOF) anunció el cierre indefinido de sus operaciones en Ciudad Altamirano, en el estado de Guerrero, debido a registrar dos meses de hostigamiento por parte de grupos delincuenciales contra sus colaboradores y ante la ausencia de un estado de derecho en la zona.

La División Gendarmería de la Policía Federal frustró hoy por la madrugada un ataque de personas armadas en contra de las instalaciones de la empresa refresquera Coca-Cola en Ciudad Altamirano; lograron decomisar armas y bombas molotov, y aseguraron a uno de los agresores.

Así lo informó Roberto Álvarez Heredia, vocero del Grupo de Coordinación Guerrero, que explicó que alrededor de las 3 de la mañana de hoy, un grupo de aproximadamente 20 hombres que iban a bordo de un camión impactó la unidad contra el portón de acceso a las instalaciones de la empresa refresquera, acción que fue detectada por los elementos de la PF.

Al notar la presencia de los federales, los delincuentes abrieron fuego, registrándose un enfrentamiento en el que no hubo personas lesionadas, y aunque uno de los agresores fue detenido, el resto logró huir.

Los delincuentes abandonaron en el lugar una camioneta pick up, color rojo, una arma corta tirada dentro de las instalaciones, casquillos calibre 7.62mm y varios envases de plástico llenos con gasolina mejor conocidos como bombas molotov, con los cuales pretendían incendiar las instalaciones de la refresquera.

Álvarez Heredia dijo que el sujeto detenido, el vehículo y el arma asegurados fueron puestos a disposición de las autoridades correspondientes.

“Con el objetivo fundamental de preservar la integridad y la seguridad de sus colaboradores, Coca-Cola Femsa decidió cerrar sus operaciones de forma indefinida, a partir del viernes 23 de marzo en Ciudad Altamirano, Guerrero. La medida fue tomada anteponiendo la seguridad de más de 160 colaboradores que laboran en el Centro de Distribución”, dijo la empresa en un comunicado.

El corporativo añadió que “la falta de condiciones necesarias para operar de manera eficiente y segura en esta zona del estado de Guerrero, así como la reciente agresión injustificada hacia uno de nuestros colaboradores, llevó a la empresa a tomar esta decisión”.

Desde enero de este año, los integrantes del Centro de Distribución de KOF en Ciudad Altamirano comenzaron a recibir constantes amenazas y agresiones por parte del crimen organizado, así como afectaciones a las instalaciones de la empresa. En últimas fechas uno de los trabajadores fue herido.

“Coca-Cola Femsa reitera su compromiso de trabajo en estricto apego a la cultura de la legalidad que le caracteriza”, indicó.

KOF es el embotellador más grande de Coca-Cola en el mundo por volumen de ventas, la empresa tiene un portafolio de 169 marcas que entrega a más de 381 millones de consumidores a diario. La firma cuenta con más de 100 mil empleados y comercializa cerca de 4 mil millones de cajas unidad a través de 2.8 millones de puntos de venta cada año.

Femsa es el holding o propietario de KOF, además de tener otros negocios como las tiendas de conveniencia Oxxo, farmacias y gasolineras bajo el nombre de Oxxo Gas.

Con información de Excélsior y El Universal