La Tom Brady mania sigue vigente y luego de conquistar el Super Bowl, sus tarjetas subieron de precio y ahora una tarjeta se vendió por más de 2 millones de dólares.

A principios de marzo se vendió una por 1.3 millones de dólares y se creía ya un récord imposible de superar para cualquier tarjeta de futbol americano, pero ayer rompieron el récord, vendiéndose por 2.25 millones.

La tarjeta de la serie 2000 Playoff Contenders Championship Rookie Ticket está autografiada y numerada como 99 de 100, lo que significa que solo se produjeron 100 copias de esa tarjeta en particular.

 La versión que se vendió en marzo al CEO de FitBit, James Park, fue calificada con un 8 y el autógrafo con 10. La tarjeta que se vendió esta semana fue calificada como un 8.5 y el autógrafo en 9, sin embargo, el comprador de esta tarjeta en particular desea permanecer en el anonimato. 

El ascenso meteórico de precios con solo unos meses de diferencia es un ejemplo perfecto del auge que la industria de tarjetas deportivas ha experimentado en el último año. En comparación, una versión mejor calificada de esta tarjeta de novato de Brady, una Mint 9 con calificación de 10 en el autógrafo, se vendió por 400,100 dólares hace apenas dos años.

Ahora la misma tarjeta ha superado los 2 millones de dólares a medida que los precios por tarjetas deportivas y objetos coleccionables raros y caros siguen subiendo.

Pero no se descarta que este año, otra tarjeta pueda superar el precio de lo que pagaron por la de Brady.