Van der Bellen asume como presidente de Austria

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Van der Bellen asume como presidente de Austria

El nuevo presidente austriaco, Alexander Van del Bellen (c), da un discurso durante su investidura en la Asamblea Nacional en Viena, Austria. Foto: EFE
Van der Bellen, ex profesor de economía, derrotó en la segunda vuelta al candidato ultraderechista Norbert Hofer con un 53.8 por ciento de los votos.
Europa debe cerrar filas y definir sus valores"...
Alexander Van del Bellen, presidente austriaco

El ex líder verde Alexander Van der Bellen, de 73 años, asumió hoy su cargo como nuevo presidente de Austria tras ganar las elecciones el pasado 4 de diciembre.

"Prometo acatar fielmente la Constitución y todas las leyes de la República y cumplir de buena fe con mis obligaciones", aseguró el dirigente.

La ceremonia en el Parlamento se vio ensombrecida por la grave crisis de Gobierno en la que se encuentra inmerso el país. La coalición entre los socialemócratas (SPÖ) y los conservadores (ÖVP), hasta ahora en el poder, está negociando si tiene sentido mantener la alianza.

Esta tarde la coalición presentará su renuncia a Van der Bellen como es habitual siguiendo la tradición, si bien se trata de una mera formalidad. Se considera seguro que el presidente la rechazará.

Van der Bellen, ex profesor de economía, derrotó en la segunda vuelta al candidato ultraderechista Norbert Hofer con un 53.8 por ciento de los votos.

El ahora jefe de Estado lideró Los Verdes durante 11 años, pero a estas elecciones se presentó como candidato independiente para ampliar sus posibilidades, si bien su campaña estuvo financiada y organizada por el partido ecologista.

El nuevo presidente austriaco, Alexander Van del Bellen (c), revisa la guardia de honor durante el día de su investidura en Viena, Austria. Foto: EFE

Los comicios de diciembre fueron los primeros en la historia de Austria en los que ningún candidato de los dos grandes partidos, el SPÖ y el ÖVP, llegó a la segunda ronda para disputar la presidencia. Ambos cayeron en la primera vuelta con los peores resultados de su historia, de alrededor de un 11 por ciento.

El mandato del anterior presidente, Heinz Fischer, expiró el pasado 8 de julio tras 12 años. Desde entonces la jefatura del Estado estaba en manos de la Presidencia del Consejo Nacional, una de las cámaras del Parlamento.

Van der Bellen, un ferviente europeo hijo de refugiados

Alexander Van der Bellen llegó a la Presidencia de Austria con una plataforma pro-europea que también aboga por los derechos de los inmigrantes.

La biografía del ex político de los Verdes deja en claro por qué su visión es diametralmente opuesta a la de Norbert Hofer, su derrotado rival del euroscéptico y antiinmigrante Partido de la Libertad (FPÖ).

Van der Bellen nació en 1944 en Viena, de padre ruso y madre estonia, quienes huyeron de los soviéticos. Lleva apellido holandés debido a que su familia paterna emigró desde los Países Bajos a Rusia cerca del 1700.

El presidente austriaco, Alexander Van der Bellen (i), pronuncia su discurso ante de los miembros de su gobierno. Foto: EFE

"No pueden esperar que yo, un hijo de refugiados, diga que mis padres deberían haber sido rechazados", declaró alguna vez al explicar por qué se opuso a las restricciones impuestas por el Gobierno austríaco a la llegada de inmigrantes.

Van der Bellen también se diferenció del euroscéptico Hofer al subrayar la necesidad de una Unión Europea más fuerte y unificada, especialmente de cara a la incertidumbre abierta tras la victoria electoral de Donald Trump en Estados Unidos.

"Europa debe cerrar filas y definir sus valores" en respuesta al creciente aislacionismo de Estados Unidos, dijo.

La historia política de Van der Bellen tiene algunas idas y vueltas. Sascha, como lo llaman su familia y amigos, creció en un remoto valle tirolés y estudió economía en Innsbruck.

En su época de estudiante, Van der Bellen se unió al Partido Socialdemócrata a mediados de 1970, cuando muchos jóvenes veían al canciller Bruno Kreisky como símbolo de una Austria más moderna e internacional.

No obstante, se sintió atraído por el naciente movimiento verde a mediados de 1980, cuando activistas ocuparon una zona junto al río Danubio para protestar por la construcción de una planta eléctrica.

Van der Bellen se afilió a los verdes y se convirtió en parlamentario en 1994. Sólo tres años después fue elegido líder del partido y permaneció al frente de la formación durante 11 años.

Para la elección presidencial, Van der Bellen decidió presentarse como independiente, a pesar de que su campaña fue ampliamente apoyada y financiada por los Verdes.

Trató de llegar a los votantes de centro-derecha resaltando sus raíces alpinas, y durante los últimos meses de campaña se mostró con la vestimenta austríaca tradicional. Pese a ello, a este candidato intelectual le resultó a menudo difícil conectar con los votantes de la clase obrera.

Van der Bellen mantiene su vida privada alejada de la luz pública. Su segunda esposa, Doris Schmidauer, lidera el grupo parlamentario de los verdes, un trabajo que planea mantener mientras sea primera dama. Van der Bellen tiene dos hijos de su primer matrimonio.