Una jornada en rojo

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Una jornada en rojo

Ayer diversos actos violentos -incluyendo disparos a instalaciones judiciales- marcaron el día en Saltillo

La seguridad en Coahuila ha tenido importantes avances en materia de combate al crimen, sobre todo en los delitos de alto impacto. Parecen lejanas las llamas de la violencia que alcanzaron a la entidad durante el periodo de 2009 a 2011, cuando las disputas por el control “de la plaza” entre cárteles  del crimen organizado provocaron la desestabilización de la paz social en la entidad.

En la actualidad; sin embargo, las alzas en índices criminales se han trasladado a delitos que alcanzan y golpean de manera más directa a la población: robos, extorsiones, asaltos.

En esta edición reportamos los cuatro asaltos violentos que durante las últimas horas se perpetraron en Saltillo.

Hombres armados que ingresan e intentan llevarse un cajero, o que delinquen al interior de una tienda y se agencian 50 botellas de licor y 100 cajas de cigarros. Crímenes que trastocan a la sociedad, aunque no con la sonoridad de antaño.

Aunque no tenga esos mismos decibeles, sí resulta estrujante para la sociedad no encontrar una solución inmediata.

Y máxime como lo documenta el Consejo Cívico de las Instituciones en Coahuila, donde las cifras y tendencias apuntan a que los principales males en materia de seguridad y justicia en la entidad se ciñen a: los robos a casa-habitación, la falta de denuncia y la impunidad.

Una fórmula con cierta lógica: ¿Cómo el ciudadano se atreverá a denunciar un delito –aunque sea de poca monta- cuando existe un índice de impunidad de 99.5 por ciento?

Las mejoras en seguridad deberán ir de mejoras en el aparato de procuración de justicia y castigo de conductas que trastocan la ley.

La correcta implementación del nuevo de Sistema de Justicia Penal podrá ayudar si se mejoran los índices de castigos presentes hasta ahora.

Así, con menos impunidad, mayor confianza para denunciar de parte de la ciudadanía.

Los avances en materia de seguridad –hasta ahora- son plausibles, pero no suficientes.

Las autoridades bajo cualquier fórmula –Mando Único o corporaciones de los distintos niveles- deben generar mayor confianza en la ciudadanía para ser un sostén en el combate a la delincuencia a través de la denuncia.

Ojalá que la violenta jornada de ayer, con asaltos y ataques a instituciones –como la circunstancia vivida en las instalaciones del Poder Judicial de la Federación- no vuelva a ser el lugar común de nuestros días en Saltillo y el resto del Estado.

La entidad y la población merecemos la paz y armonía por las que se trabaja todos los días.