Superar un reto tan grande como el Coahuila 1000, etapa que forma parte del Serial Nacional de Ruta Offroad, es un logro muy especial para el equipo Serviauto 420, integrado por Manuel Álvarez Rivera y Manuel Álvarez Dainitín, quienes se colocaron en el primer lugar de la Clase 12, división que lideran a falta de par de pruebas para concluír el calendario.

Padre e hijo no sólo consiguieron recorrer los mil 200 kilómetos y atravesar el territorio coahuilense de Piedras Negras a Torreón —cruzaron por 14 municipios—, sino enfrentar y superar los retos a los que el camino los enfrentó.

Esta travesía significó largas horas de manejo por una ruta complicada, a la cual se sumaron las inclemencias del tiempo como el calor, la lluvia, granizo y el frío.

“Estamos satisfechos porque es algo que no cualquiera logra”, indicó Manuel Álvarez, padre.

El reto fue tan grande que sólo algunos pilotos consiguieron cruzar la meta, mientras que otros tuvieron que ser rescatados.

La ruta provocó que los participantes y sus equipos pasaran de la emoción al miedo, pues la dificultad crecía a cada kilómetro, donde los pilotos se enfrentaron a condiciones de manejo increíbles.

A esto se suma la exigencia a los vehículos en ambas etapas, donde alguna falla mecánica o pinchadura estaba latente, “los fierros no tienen palabra”. Sin duda, una preocupación extra para los pilotos y sus equipos, pues aunque los paisajes que recorrieron fueron espectaculares, la fauna salvaje también estuvo presente. “La verdad tener que pasar la noche ahí está complicado, no falta algún animal; nosotros vimos un coyote, a un compañero se le atravesó un gato montés y pues hay muchas víboras”, dijo Álvarez Rivera.

“En el primer día, en el ejido El Melón (territorio de Múzquiz), se quedó uno (vehículo) que ya no salio durante los 2 días, hasta que fue rescatado”, agregó.

Apenas unas cuantas vivencias de todo lo ocurrido a lo largo de los mil 200 kilómetros, pero los Álvarez están contentos por haber conseguido la victoria, la cual, aseguraron, no hubiera podido ser posible sin la ayuda de su equipo, otros pilotos y amigos. “No quisiéramos dejar fuera a nadie, pero por ahí estuvieron Raúl López, Javier López, Jorge Zapata, Arnoldo, Manuel de La Colina, Cárter, Sergio Mercado “El Rojo” y Arturo Espinoza Jr.”.

El Coahuila 1000 Rally Desert lo tomaron como un reto personal y lograron superarlo, pero esta aventura les dejó, como a la mayoría de los participantes, un sabor agridulce, pues los organizadores fallaron.

La polémica se desató ecuando pilotos de diferentes puntos del país levantaron la voz para quejarse, pues los organizadores no respetaron las reglas al 100 por ciento; las condiciones hicieron de la carrera una muy complicada y algunos equipos decidieron salirse de ruta, lo que significaría una descalificación automática, y eso no pasó, dando el triunfo a navegantes que no completaron el recorrido marcado.

Aún así, los Álvarez, quienes sortearon la ruta y lograron vencer en su división, hoy pueden presumir del liderato de la Categoría Clase 12 en el serial, donde suman tres primeros lugares con el Coahuila 1000, el cual se añade a los conseguidos en Parras, Aguascalientes y Cuatrociénegas; además de un cuarto lugar en San Luis Potosí.

Guadalajara es el siguiente reto.

598 puntos, la falta de par de fechas, mantienen en el liderato de la Clase 12 del Seril Nacional a los Álvarez.