Un capítulo más de la deuda

Usted está aquí

Un capítulo más de la deuda

Recuerda usted en que momento solicitó un crédito por 11 mil 973 pesos o cual fue la última compra que realizó por esa cantidad. Si no ha hecho ninguna de estas dos opciones no importa, de todos modos usted al igual que yo debe esa cantidad, gracias a la deuda contraída por el gobierno de Humberto Moreira que asciende a 36 mil millones de pesos.

Normalmente cuando adquirimos una deuda en nuestras finanzas personales buscamos un beneficio, sin embargo, el principal problema sobre la deuda estatal es que los coahuilenses no obtuvimos ninguna recompensa, por el contrario, ha estado en riesgo nuestro desarrollo como estado.

Esta semana la Secretaría de Finanzas informó que con “el objetivo de disponer de mayores recursos económicos para destinarlos a obras, programas sociales y el fortalecimiento de la seguridad, el Gobierno del Estado de Coahuila inició la reestructuración de su deuda a largo plazo –cuyo saldo actual es de 36 mil 121 millones de pesos–, con la publicación de la convocatoria pública a instituciones financieras que deseen participar en este proceso que podría culminar en noviembre de este mismo año”. Esta sería una nueva reestructuración y ya hay voces que advierten que se elija la mejor opción donde en realidad se pague a capital y no sólo intereses.

Al respecto el presidente de Coparmex Coahuila Sureste, Ricardo Sandoval Garza, dijo que todas las reestructuras son buenas, siempre y cuando se logre bajar la tasa de interés, pero también que las comisiones que se generan en la reestructura sean mínimas, porque a veces los intermediarios o los “brokers” bancarios cargan altas comisiones.

“Que verdaderamente el plan incluya abono a capital, porque en los últimos seis o siete años se pagó mucho a puros intereses, que se obligue al Estado a pagar capital para que se vaya reduciendo tanto el capital y la mensualidad”. Y es que a más de 6 años de la contratación de la deuda con documentos apócrifos, esta no ha disminuido y por el contrario ha aumentado.

De acuerdo al Centro de Investigación Económica y Presupuestaria (CIEP), la deuda de Coahuila representa casi el 87 por ciento de sus ingresos totales, lo que constituye una pesada carga financiera para el estado y sus habitantes.

Kristobal Meléndez, investigador del CIEP, ha afirmado que Chihuahua, Quintana Roo y Coahuila son las entidades más endeudas, ya que sus pasivos representan 8.8, 6.6 y 5.6 por ciento de su Producto Interno Bruto (PIB), muy por arriba del 3.0 que se promedia a nivel nacional.

¿Cuántas escuelas, hospitales, carreteras y demás obras de infraestructura se han dejado de construir en Coahuila por pagar la deuda? Algunas voces hablan de más de 16 distribuidores viales y más de 60 hospitales de alta especialidad. 

Es cierto, tal vez Coahuila no esté quebrado, pero sin duda es muy poco el margen de maniobra que tiene el actual gobierno que encabeza Miguel Riquelme. 
Para el doctor Arturo Huerta González, académico de la Universidad Nacional Autónoma de México (UNAM), el principal problema en Coahuila fue que la deuda no se utilizó para impulsar la actividad económica y productiva que generara ingresos para poder pagarla.

“La deuda tiene que ser acorde a los ingresos que tenga el estado y que tendrá en el futuro, para asegurar el reembolso porque lo que pasó (en Coahuila) y en otros estados es que los gobiernos se han sobre endeudado pasando los límites, entonces ponen de garantía las participaciones federales, así como los activos que tienen”.

Para Huerta González el no haber generado recursos para pagar la deuda y el hacerlo con el dinero de las participaciones federales, ha mermado la capacidad de gasto de la entidad. También al recurrir a la venta de activos, los estados se están descapitalizando.

A más de siete años de que dejara el poder Humberto Moreira, los coahuilenses no sabemos cuál fue la justificación del entonces gobernador para contratar esos niveles de deuda, ya que en el discurso se llegó a decir que todo era para adelantar el progreso de Coahuila 20 años, hoy sabemos que no es así, por el contrario la capacidad de invertir en infraestructura y alcanzar un mayor desarrollo se han visto afectados mientras que usted y yo debemos más de 11 mil pesos. 

@lharanda