Un bebé ingiere cada día más de un millón de micropartículas de plástico de su biberón, en promedio, según un estudio, que sugiere algunos consejos para reducir esta ingesta cuyo impacto en la salud se desconoce.

Los autores del estudio, publicado en Nature Food, sometieron modelos de biberones en polipropileno al proceso de preparación recomendado por la Organización Mundial de la Salud: esterilización y preparación de la leche maternizada con agua calentada a 70 grados Celsius, para eliminar las bacterias.

Los PP IFB liberan microplásticos con valores tan altos como 16 millones 200 mil partículas por litro.

Los estudios de escenarios mostraron que la esterilización de PP IFB y la exposición a agua a alta temperatura aumentan significativamente la liberación de microplásticos. 

Una prueba de 21 días de PP IFB mostró fluctuaciones periódicas en la liberación de microplásticos. 

La exposición cotidiana es más fuerte en los países desarrollados donde la lactancia materna tiene menos peso: 2.3 millones de microplásticos en Norteamérica y 2.6 millones en Europa.