Tras 6 horas de una sesión extraordinaria del Consejo Universitario de la UAdeC para debatir el pliego petitorio del Movimiento Estudiantil Coahuilense (Moesco), en la que participaron autoridades, docentes, alumnos, sindicato y jubilados, este organismo tomó acuerdos sobre cuotas de inscripción y el programa de inclusión, entre otros temas, aunque las decisiones no fueron bien recibidas por estudiantes, quienes realizaron un plantón en la Rectoría.

“Hoy (ayer) se tomaron decisiones importantes en la Universidad, una serie de posturas, donde no solo es una sesión histórica en este formato, sino también es una muestra de que en la Universidad Autónoma de Coahuila hay democracia y está abierta para que cualquier organismo, ciudadano, universitario en este caso, que tenga una inquietud, una necesidad, tenga voz en este Consejo y pueda externar su opinión, postura y propuesta”, dijo Octavio Pimentel, director de Asuntos Académicos de la UAdeC, en entrevista para VANGUARDIA en el programa Conversando, conducido por el periodista Carlos Arredondo.

La decisión más importante fue la reducción del 8.3 por ciento a la cuota de inscripción: 3 mil 920 pesos para estudiantes de reingreso y 4 mil 326 pesos para nuevo ingreso, monto similar al del año 2018.

También se acordó ampliar el pago hasta el 17 de septiembre y llegar a convenios de pagos en meses posteriores, así como una implementación de créditos y apartados en cuotas bajas.

Sin embargo, integrantes del Moesco primero solicitaron una reducción del 80 por ciento en su pliego petitorio, que después modificaron al 55.4 por ciento durante la sesión.

“Se analizaron y se tomaron en cuenta todas las posturas de todos los universitarios, entiendo yo que existía una postura de una cantidad, después hubo una propuesta de otra reducción, después otra propuesta, y en todas y cada una de ellas se analizaron las ventajas y desventajas que pudiesen tener, y las repercusiones”, aclaró Octavio Pimentel, de la UAdeC.

Otro acuerdo fue ampliar el Programa de Inclusión en más del 60 por ciento, para beneficiar a mil 900 estudiantes en situación socioeconómica complicada, con lo que solo deberán pagar una cuota simbólica de 10 pesos por todo el año escolar.

Este programa está basado en la metodología del Ceneval y en estudios socioeconómicos internos de la Universidad para identificar y apoyar a nuevos alumnos y de reingreso.

También  el Consejo Universitario decidió no afectar el sueldo de los trabajadores universitarios y fortalecer los mecanismos de comunicación.