Turnan caso de abuso sexual en Saltillo a Nuevo León

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Turnan caso de abuso sexual en Saltillo a Nuevo León

Foto: Archivo
31 años tiene la mujer abusada sexualmente.

Saltillo.- A Santa Catarina, Nuevo León, será remitido el caso de la mujer golpeada y abusada sexualmente, que condujo de su domicilio hasta la casa de sus padres y de donde fue llevada al hospital. 

El personal del Centro de Justicia y Empoderamiento de la Mujer acudió a las instalaciones del Hospital Privado la tarde del sábado a tomar la declaración de la mujer de 31 años. 

Al momento de llegar al nosocomio, los médicos y las autoridades del hospital dieron aviso a las instancias de seguridad y personal ministerial de lo ocurrido, pues se sigue el protocolo en estos casos de agresión a la mujer. 

Una vez que la afectada se encontraba mejor de sus lesiones, se le tomó la declaración ministerial correspondiente por parte de las autoridades y se le brindó la ayuda psicológica y legal correspondiente. 

Sin embargo, el caso tendrá que ser remitido al municipio de Santa Catarina, Nuevo León, pues fue el lugar donde ocurrieron los hechos, así que cuando se recupere tendrá que acudir con las autoridades de Nuevo León. 
Del agresor no se han dado generales por parte de las autoridades para no entorpecer las investigaciones y se logre su detención en las próximas horas. 


Agrede a su esposa con vidrio

Después de quebrar un cristal con la mano, Francisco Bernal tomó uno de los pedazos del vidrio y le ocasionó una lesión a su pareja, quien llamó a las autoridades denunciando la violencia. 

Alrededor de las 22:40 horas del sábado, oficiales municipales acudieron a Cañón de Carbonera, en la colonia Nuevo Teresitas, donde se reportaba una escena de violencia familiar. 

En el lugar se entrevistaron con una mujer, quien al abrirles la puerta presentaba una lesión cortante en el brazo derecho; se le cuestionó por las lesiones y manifestó que fue su pareja quien la lastimó. 

Dijo que su marido y ella estaban juntos cuando de pronto, sin algún motivo aparente, el hombre la amenazó de muerte y la ofendió con palabras altisonantes y en ese momento quebró uno de los vidrios de la casa. 

Tomó un pedazo de los vidrio y lo pasó por el brazo de la mujer, quien no reaccionó pues tenía miedo de que le hiciera algo más grave; explicó que mejor se alejó y pidió ayuda a las autoridades. 

Con permiso de la afectada, los policías entraron a la casa y una vez que les fue señalado el agresor se procedió a leerle sus derechos y colocarle las esposas para su traslado a las celdas de la Policía Municipal, donde quedó a disposición del Centro de Justicia y Empoderamiento de la Mujer para determinar su situación legal.