PARÍS.- La cantautora mexicana Natalia Lafourcade triunfó esta noche en la emblemática sala Bataclan de París, en su primer gran concierto en solitario en la “Ciudad Luz”.

En el también primer concierto de un artista mexicano en la sala que fue escenario del atentado yihadista de noviembre de 2015, cerca de mil 200 personas, una gran parte del aforo total, vibraron, bailaron y se emocionaron al ritmo de la artista veracruzana.

“Estoy feliz, muy, muy contenta, de mi primera vez en solitario en París. El público ha sido maravilloso, muy cálido. Estoy feliz porque me hicieron sentir como en casa”, declaró al terminar el evento la intérprete de “Ella es Bonita”.

“No sabía que resultaría tan bien, de que un lugar como el Bataclan tuviera tanta gente, en un día como hoy, martes”, agregó Lafourcade, quien se presentó en París tras actuar en Londres, en el marco de una gira por Europa que comenzó en la capital británica.

La cantante, quien había actuado en París en dos ocasiones previas pero no en solitario, subrayó la particularidad de dar un concierto en el Bataclan, donde el viernes 13 de noviembre de 2015 fallecieron 90 personas durante un atentado reivindicado por el grupo yihadista Estado Islámico (EI).

“Es raro hacer una fiesta en un lugar como este, pero yo pienso que para eso sirve la música realmente, para olvidarnos de cosas malas, para sanar el corazón”, comentó sobre la sala, reabierta un año después del ataque que conmocionó al mundo.

El concierto de la mexicana se celebró en la noche de un martes y 13, marcado por los malos augurios de la fecha.

Debido a un problema con el transporte de los músicos del grupo desde Londres, el concierto comenzó con más de una hora de retraso, según el horario previsto, y con algunos problemas de sonido.

Pero Natalia y la banda supieron solventarlos y prender los ánimos progresivamente y entusiasmar a un público en el que destacaban los mexicanos, pero también los franceses, los latinoamericanos, los españoles y personas de múltiples nacionalidades.

El concierto, al que asistió el embajador de México en Francia, Juan Manuel Gómez Robledo, duró una hora y media aproximadamente y terminó con el público maravillado, que le regalaba flores a Natalia y pedía más bises.