La Corte Suprema de España rechazó una solicitud de los fiscales para reactivar la orden de arresto internacional de Carles Puigdemont después de que el depuesto presidente catalán voló a Dinamarca desde Bélgica para hablar en una conferencia esté Lunes.

Puigdemont, que huyó de España a fines de octubre después de ser despedido por el gobierno de Madrid, enfrenta posibles cargos de rebelión, sedición y uso indebido de fondos públicos por su papel en la campaña para dividir a Cataluña de España. Será arrestado en el momento en que ponga el pie en suelo español.

La decisión de reactivar la orden de arresto se pospuso hasta que el parlamento catalán recupere su actividad normal, dijo el tribunal en un comunicado el lunes.

Hablando en Bruselas, el ministro español de Asuntos exteriores, Alfonso Dastis, declaró: “El señor Puigdemont está sujeto a un proceso en España. Fuera, por el momento, sus movimientos son gratuitos dentro de la Unión Europea, pero ya veremos”.

La orden se abandonó en diciembre por discrepancias entre las leyes belga y española que limitarían los cargos bajo los cuales Puigdemont podría ser extraditado y, por lo tanto, se le cobrará a su regreso.

Puigdemont intenta regresar como presidente de Cataluña después de las elecciones anticipadas de diciembre, en las que los partidos secesionistas conservaron su mayoría en el parlamento regional.

Roger Torrent, el recién elegido presidente del parlamento catalán, propuso el lunes formalmente a Puigdemont como candidato para formar un gobierno.

Torrent, miembro del partido independentista catalán de izquierda, reconoció la situación legal de Puigdemont como candidato para formar un gobierno.

Torrent, miembro del partido independentista catalán, propuso el lunes formalmente a Puigdemont como candidato para formar un gobierno.

Torrent, miembro del partido independentista catalán de izquierda, reconoció la situación legal de Puigdemont, pero dijo que el expresidente era un candidato legítimo.

También dijo que había escrito al primer ministro español, Mariano Rajoy, para solicitar una reunión para discutir lo que denominó la “situación anormal” en el parlamento regional.

Puigdemont espera prestar juramento por videoconferencia o utilizar uno de sus parlamentarios para leer su discurso de candidato cuando el parlamento regional comience un debate para elegir a su nuevo líder a fines de enero.

Sin embargo, Rajoy ha dicho que Puigdemont debe asistir a los debates de investidura en persona.

“Es absurdo que alguien intente ser un candidato para ser jefe del gobierno regional mientras está en Bruselas y huyendo de la justicia”, dijo Rajoy la semana pasada. “Esto ya no es solo un problema judicial y político. Este es un problema de puro sentido común”.

El gobierno español asumió el control de Cataluña el 27 de octubre después de que el gobierno de Puigdemont celebró un referéndum ilegal y el parlamento catalán declaró unilateralmente la independencia, sumiendo a España en su peor crisis política desde su regreso a la democracia hace cuatro décadas.

Con información de The Guardian